Un informe de los técnicos municipales desvela lo que se hizo mal en esa obra y piden que no se vuelva a repetir
El colorido, mullido y poco adecuado pavimento de la calle Miguel Fluiters de Guadalajara capital iba a instalarse en más zonas de la ciudad. Así se desprende del informe elaborado por los técnicos municipales del Ayuntamiento de Guadalajara al que ha tenido acceso Guadalajara Diario, informe en el que piden que no lleve a cabo la instalación tras el desastroso resultado obtenido en la calle Miguel Fluiters.
La pasada semana el ayuntamiento de Guadalajara firmaba con la empresa adjudicataria la modificación del proyecto de reforma de las obras para las zonas de coexistencia en la Plaza Virgen de la Antigua, una zona que lleva meses de invadida por las reformas y que enfila su recta final.
Los trabajos se están realizando en la calle Miguel de Cervantes, Travesía de Santo Domingo, Plaza Virgen de la Antigua y calle Ángel Martín Puebla y en esas mismas calles se iba a instalar el citado pavimento. Un pavimento, de color verde, que fue muy criticado en redes sociales primero por su color y después porque en unos meses todo estaba deteriorado.
Según se indica en el modificado del proyecto al que ha tenido acceso Guadalajara Diario, tras comprobar el mal resultado de lo hecho en Miguel Fluiters se ha decidido cambiarlo. La opción es instalar el pavimento que se ha puesto en la calle Arrabal del Agua que imita adoquines.
Las otras ideas a no repetir
Pero no es lo único que no ha funcionado en la reforma de Miguel Fluiters. Ahora han decidido que en la Travesía de Santo Domingo no se instalen árboles sino jardineras con riego y explican por qué “se ha comprobado en las obras de C/ Miguel Fluiters anteriormente citadas, que la colocación de árboles de bajo porte implica problemas de durabilidad de los mismos por vandalización y golpeo de los coches que invaden las aceras por ser calles de coexistencia. Se considera adecuado incluir jardineras con plantas que eviten estos problemas”- señala el informe.
Y como no hay dos sin tres, en el informe de los técnicos se señala que se recomienda no quitar algunos de los bolardos de la Travesía de Santo Domingo para proteger a los peatones, ya que tras la reforma de Miguel Fluiters se ha visto que los coches invaden las aceras, “una vez puesta en servicio la C/ Miguel Fluiters, se observa que los vehículos invaden de manera constante las aceras destinadas al tráfico peatonal, lo que supone un problema de durabilidad del pavimento de aceras y de seguridad para los peatones. Como consecuencia y teniendo en cuenta las reducidas dimensiones de la acera izquierda (siguiendo el sentido de circulación) en la Travesía de Santo Domingo, se decide no acometer la retirada de bolardos en esta acera para proteger al peatón”.
Hay que recordar que la obra de Miguel Fluiters, que sufrió enormes retrasos en su ejecución y que duró cinco meses; costó 291.257,68 euros más IVA, de los que 218.162,25 euros proceden de los fondos europeos Next Generation, y los 73.095,43 euros restantes fueron aportados por el propio ayuntamiento de Guadalajara.