Se han invertido 8,3 millones de euros
El parador de Sigüenza, que cerró sus puertas el 14 de octubre por obras, volverá a funcionar en breve. Hoy la presidenta de Paradores, Raquel Sánchez, ha acompañado al ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, en una visita a las obras, y ha anunciado que el establecimiento reiniciará su actividad el próximo 9 de mayo. Hay que recordar que el otro parador de la provincia, el de Molina, lo hará el 14 de mayo.
El ministro Herey y la presidenta de Paradores junto a autoridades autonómicas y locales
La intervención ha modernizado y mejorado el establecimiento en cuanto a accesibilidad, sostenibilidad, interiorismo y conservación y puesta en valor de los elementos arquitectónicos más emblemático.
La intervención se enmarca dentro del histórico proceso de transformación que está acometiendo la hotelera pública de cara a celebrar su centenario en 2028, año en el que el edificio de Sigüenza cumplirá 50 años como parador.
Reforma en profundidad
Se han reformado los baños de 21 habitaciones, para modernizar sus instalaciones y cambiar las bañeras por platos de duchas con el fin de mejorar la comodidad de uso y la accesibilidad de los clientes, así como los baños públicos. Posteriormente se llevarán a cabo las obras de adecuación del resto de los baños de todas las habitaciones restantes del Parado.
Además, de cara a mejorar la eficiencia energética del edificio se han cambiado las calderas de gasóleo para su transformación a gas natural, lo que reducirá en más de un 25% el consumo energético de calefacción del Parador, recortará más de un 60% la factura por este concepto y rebajará un 52% las emisiones de CO2, lo que supone 200 toneladas de dióxido de carbono que equivalen a plantar unos 350 árboles.
Así mismo, se han sustituido los fancoils del aire acondicionado de salones y zonas comunes, además de la enfriadora, apostando por un nuevo sistema de control automatizado de toda la climatización. Igualmente se han reemplazado las carpinterías exteriores, así como las interiores de las habitaciones, para mejorar el aislamiento y la eficiencia térmica, incluyendo puertas resistentes al fuego y acústicas, que mejoran la insonorización y el control de ocupación.
La intervención ha incluido también obras de remodelación en la zona del aljibe, de las instalaciones existentes y la adecuación de los sistemas contra incendios, así como un proyecto integral de redecoración que ha actualizado la imagen del hotel mejorando la iluminación de zonas comunes, pasillos y habitaciones, optimizando la distribución de salones y restaurante, y sustituyendo textiles y muebles obsoletos y deteriorados por el uso y paso del tiempo.
Obras patrimoniales
Por su parte, Turespaña ha restaurado la barbacana, ha recuperado su adarve para que pueda recorrerlo el público y ha habilitado la azotea de la torre noroeste como un nuevo espacio visitable y un punto Startlight para observación astronómica. También se ha procedido a reacondicionar la entrada del Parador, se han restaurado y acometido consolidaciones puntuales de las fachadas del castillo y se ha actualizado y ampliado la iluminación monumental de todo el perímetro de la fortaleza y de la barbacana.
Tendencia ascendente de ocupación
Pese a permanecer cerrado durante casi tres meses el año pasado, el Parador de Sigüenza mantuvo en 2024 la tendencia ascendente de la compañía. En este período se alcanzó un índice de ocupación del 75%, representando 3 puntos más respecto al mismo período del año 2023, con un total de 17.352 clientes registrados, el 81,4% de procedencia nacional. Los cubiertos vendidos durante ese ejercicio superaron los 27.000 y el ingreso medio obtenido por cada cubierto vendido fue de 33 euros.
Para Raquel Sánchez esta reapertura es otro ejemplo del trabajo que se está haciendo desde la compañía para llegar al centenario con una red renovada, gracias a una inversión histórica de 250 millones de euros