Son datos oficiales de la Confederación Hidrográfica del Tajo que ayer celebró su primera reunión con municipios de más de 20.000 habitantes para hablar de la sequía
Desde el 1 de octubre, fecha en la que se inició el año hidrológico, ha llovido una tercera parte de lo que llueve habitualmente en un año normal.
Además si se analiza la serie histórica de precipitaciones, que empieza a registrar datos en 1940, en el 95 por ciento de los años ha llovido más de lo que ha llovido en 2017. Unas cifras, ofrecidas ayer por la Confederación Hidrográfica del Tajo y que ponen negro sobre blanco, lo que está ocurriendo en la cuenca del Tajo.
Todos estos datos fueron presentados ayer por el presidente de la Confederación del Tajo, Juan Carlos de Cea, en la reunión que se mantuvo con ayuntamientos y mancomunidades que se encargan de dar de beber a núcleos de población de más de 20.000 habitantes.
Entre los asistentes a la reunión se encontraban el alcalde y vicealcalde de la capital, Antonio Román y Jaime Carnicero, respectivamente; el alcalde de Azuqueca, José Luis Blanco, y el presidente de la Mancomunidad de Aguas del Sorbe, Javier Rodríguez Palacios.
En la reunión, de Cea informó de la obligatoriedad de que los ayuntamientos y mancomunidades de más de 20.000 habitantes cuenten con un plan de emergencia ante situaciones de sequía, unos planes que establecen como abordar la escasez de agua según las alternativas de suministro de cada uno.
Además el presidente informó de la revisión de los planes especiales de alerta y de sequía en todas las demarcaciones de la cuenca. Una revisión que permitirá potenciar el vigente sistema de indicadores que permiten diferenciar con claridad las situaciones propias de sequía hidrológicas de las de escasez, así como mejorar las acciones y medidas que adoptar para luchar contra la sequía gracias a la experiencia adquirida en estos diez años que los planes de sequía llevan en vigor. De Cea pidió a los ayuntamientos y mancomunidades que realicen aportaciones en el plazo de consulta pública que durará tres meses.
Señalar que ya se ha puesto en marcha la Oficina Técnica de la Sequía para hacer un seguimiento de la situación ya que la cuenca se encuentra en situación de prealerta, una situación que se agrava en el caso de Guadalajara donde muchas demarcaciones están ya en alerta.
Datos de los embalses
Los últimos datos de la situación de los pantanos de la cuenca en Guadalajara, registrados ayer 11 de diciembre, siguen mostrados registros preocupantes.
Beleña, que es el que da de beber, a 400.000 personas del Corredor (Guadalajara, Cabanillas, Marchamalo, Azuqueca o Alcalá de Henares, entre otros) esta semana baja un 1 por ciento y almacena 5,6 hectómetros cúbicos, afortunadamente ya ha empezado a recibir aportaciones de Alcorlo un embalse que almacena 44 hectómetros cúbicos. El resto de embalses se mantienen sin cambios, tanto Entrepeñas y Buendía, como Pálmaces, la Tajera o El Vado.
El que sí ha experimentado un descenso importante es el embalse de Bolarque que ha perdido un cinco por ciento del agua que embalsa, ahora almacena 26,6 hectómetros cúbicos.Habrá que ver si la semana que viene las escasas lluvías de la tormenta "Ana" suponen algún cambio en los niveles.