La Generalitat Valenciana fijará su posición para defender los intereses de los regantes y de la agricultura de la Comunitat tras la sentencia del Supremo que anula parcialmente el Plan Hidrológico del Tajo.
El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha anunciado este lunes que el miércoles celebrará una reunión preparatoria con representantes de la Conselleria de Agricultura y la Abogacía de la Generalitat "con el máximo rigor y la máxima inteligencia y unidad" para defender los intereses de los regantes, han informado a Efe fuentes del Gobierno valenciano.
Puig ha afirmado que, en una primera lectura de la sentencia, que anula varios artículos del Plan Hidrológico del Tajo porque no fija caudales ecológicos en Aranjuez (Madrid), en Toledo y en Talavera de la Reina (Toledo), es "absolutamente compatible" la fijación de un caudal ecológico que sea razonable con el sistema del trasvase Tajo-Segura.
"Es absolutamente compatible y no vamos a permitir que se haga una posición ventajista con el intento de ganar un espacio que no entra en la racionalidad", ha manifestado.
La sentencia obliga a fijar caudales ecológicos en Aranjuez, en Toledo y en Talavera de la Reina que no estaban fijados en el plan hidrológico, aprobado por el Gobierno de Mariano Rajoy en 2016. Esto modificará inevitablemente el volumen de agua a trasvasar.
El caudal ecológico necesario es el volumen mínimo de agua necesario para evitar la degradación ambiental del curso de agua del río, su cauce y su ribera.
En esa misma línea, el presidente de Murcia, Fernando López Miras, del PP, ha dicho este lunes que la sentencia del Tribunal Supremo que anula parcialmente el plan hidrológico del Tajo por no fijar caudales ecológicos en algunos tramos "no habla del trasvase al Segura", sino solo del río.