El Tribunal Constitucional ha dado la razón al Ministerio de Defensa y ha levantado la prohibición para que algún día se pueda instalar en la cima del Pico del Lobo, con 2.274 metros de altitud --el más alto de Guadalajara y Castilla-La Mancha--, la estación de vigilancia número 14 del Ejército del Aire, así como el acceso a esa instalación a través de la sierra de Ayllón desde la ladera de la montaña que da a la parte de Guadalajara.
Estos usos militares fueron prohibidos por la declaración del parque natural de la Sierra Norte, que se promovió durante la legislatura de José María Barreda, y que engloba a la zona del Pico del Lobo-Cebollera. Pues bien, el Tribunal Constitucional ha considerado que estos incisos en concreto de la Ley "invaden la competencia exclusiva reservada al Estado" en materia de Defensa, teniendo en cuenta que cuando se aprobó esa ley regional, el Estado ya había ejercido su competencia al declarar la zona de interés para la defensa nacional el citado lugar para poder instalar allí una instalación militar de vigilancia de nuestro espacio aéreo, vinculada a la OTAN.
Para entender un poco más el asunto hay que remontarse muy atrás cuando todavía era José Bono el presidente de Castilla-La Mancha. El gobierno decidió construir una gran antena de vigilancia en la misma cima del pico del Lobo, cuya cuerda montañosa marca el límite entre Segovia y Guadalajara y entre las dos Castillas. Para poder mantener la descomunal antena hay que hacer una gran pista forestal que permita el acceso a vehículos y maquinaria pesada. De hecho, el trazado de esta pista comenzó a construirse en la vertiente de Guadalajara, ya que la cara segoviana -orientada el norte- es orograficamente más pendiente y además invadiría los terrenos de la estación de esquí de La Pinilla.
Pues bien, el gobierno de Bono hizo de su oposición a esta base militar una de las banderas ecologistas de la legislatura, apelando a la riqueza natural de la zona, y logró parar por lo menos la construcción de la citada pista. Sin embargo, la puntilla definitiva se la dio el propio Bono cuando tras ser nombrado ministro de Defensa, el proyecto se guardó en el cajón. Pero esto no significa que el ministerio renunciara para siempre jamás a su proyecto, y así sucedió que el presidente del Gobierno firmó en diciembre de 2011 un recurso de inconstitucionalidad contra parte del articulado de la Ley de Creación del Parque Natural.
La Ley del parque natural, anulada por el Constitucional, prohibía cualquier actividad militar en la zona
El Tribunal Constitucional ahora ha dado la razón a Defensa en lo fundamental, con lo que en el paraje del parque natural se podrán realizar maniobras y ejercicios militares, así como utilizar la cima del Pico del Lobo para ubicar allí la estación de vigilancia aérea. ¿Quiere esto decir que Defensa tenga intención ahora de retomar el proyecto que abandonó definitivamente a raíz del nombramiento de Bono como titular del ministerio? No hay noticias de que vaya a ser así; pero eso no quita para que esa posibilidad quede abierta, a pesar de que se quiso atajar con la creación del parque natural. Ya no. La Ley autonómica prohibía cualquier maniobra o ejercicio militar en el perímetro del parque, aunque carecieran de cualquier impacto ambiental, lo que a juicio del Estado implicaba una invasión de competencias exclusivas sobre las Fuerzas Armadas.
Sin embargo, la sentencia del Tribunal Constitucional sí da la razón al gobierno de Castilla-La Mancha en otros aspectos de menor calado, y así desestima el recurso contra otros incisos de la Ley como es el caso de la competencia sobre aguas que el Estado quería reservarse al ser supracomunitarias. En ese caso, la autonomía podrá entender de concesiones y autorizaciones de aguas en la zona del parque.