Hoy el presidente de CLM ha puesto en marcha la instalación que mandará 1 hm3 al mes
Quince municipios de la llanura manchega, que aglutinan 90.000 habitantes, empiezan a recibir, desde hoy, miércoles 29 de marzo, agua del río Tajo en sus grifos a través de la tubería manchega, una infraestructura iniciada hace años y que prevé abastecer a 500.000 personas.
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha pulsado en Saelices (Cuenca) el botón con el que arranca la llevada de agua desde el acueducto del trasvase Tajo-Segura hasta los depósitos de Castilla-La Mancha que gestiona la entidad pública Infraestructuras del Agua de Castilla-La Mancha.
Según ha podido confirmar Guadalajara Diario cada mes se enviará, a través de la llanura manchega, 1 hm3 aunque la ley permite que se derive hasta 50 hm3 al año, una cantidad que se alcanzaría según se vaya ampliando la capacidad de funcionamiento de esta nueva instalación.
¿Sale más agua de la cabecera? Aseguran que no
La duda más importante es de dónde se descuenta ese hectómetro cúbico que se va a enviar todos los meses. Según Borja Castro, vicepresidente de la mancomunidad de municipios ribereños, de la cabecera del Tajo seguirá saliendo la misma cantidad que marca el memorándum y que se aprueba mensualmente para el Levante. Y de esa cantidad, se quitará 1 hm cúbico todos los meses para mandarlo a través de la llanura manchega. “Tenemos el compromiso del Ministerio- señala Borja Castro- de que esa cantidad no será adicional sino que se detraerá del trasvase que se aprueba cada mes con destino al Levante”.
A pesar de ese compromiso, que está en vigor, reconoce que la abogacía del Estado está estudiando si este trasvase a la llanura manchega debe considerarse como algo adicional al trasvase habitual. Si se considera que es adicional al trasvase al Levante, por ejemplo de 20 hm3, habría que sumar el hectómetro que se mandará cada mes. Ya no serían 20 sino 21 hm3 pero es algo que está por ver.
Sobre su posicionamiento ante nuevos trasvases Borja Castro es claro y afirma que nunca se han opuesto ni se van a oponer a que se envíe agua para consumo humano.
Más municipios se suman a la tubería manchega
Este envío de agua beneficia a un puñado de municipios pero ya hay otros que han mostrado su intención de adherirse, es el caso de Tarancón (Cuenca), La Roda (Albacete), la comarca del Campo de Calatrava (Ciudad Real) y 26 pequeñas localidades conquenses, con lo que "en poco tiempo" habrá 500.000 habitantes de Castilla-La Mancha que beben agua del Tajo, que es la capacidad del sistema actual, ya que puede tratar 3.200 litros de agua por segundo y abastecer a medio millón de personas.
Durante los primeros seis meses será agua mixta la que sale del grifo de los municipios, pero después todo el agua consumida en estos municipios será totalmente del Tajo ya que la Junta trabaja en licitar una planta de ósmosis inversa, este año, que permitirá que el agua lleve sin sulfatos.
Al acto de puesta en marcha han acudido el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán; el expresidente de Castilla-La Mancha José María Barreda; el consejero de Agricultura de Castilla-La Mancha, Francisco Martínez Arroyo, y los quince alcaldes de los municipios que ya se han sumado a recibir agua del Tajo: once de la provincia de Cuenca, dos de Ciudad Real y dos de Albacete.
Page: "Agua para beber"
El presidente de Castilla-La Mancha ha repetido en numerosas ocasiones durante su intervención que el agua derivada a la tubería manchega es para beber y también ha subrayado que Castilla-La Mancha se ha "resignado" a no tener más regadíos porque entiende que beber es prioritario, tanto para Castila-La Mancha como para Levante.
Ha argumentado que la obra de la tubería manchega ha tenido "dos enemigos", unos en Levante, de quienes miraban hacia otro lado aún cuando no hubiera agua para beber en Castilla-La Mancha, y otros dentro de la región, a modo de "caballo de Troya", ha dicho, ya que en la legislatura de María Dolores de Cospedal (PP) se paró presupuestariamente el proyecto y fue abandonado.
El secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, ha dicho que la política del agua es el eje central de la política de seguridad de un país, teniendo en cuenta que son inversiones para garantizar las condiciones de vida de la población, y ha instado a "superar la política de disputas", y "eludir procesos de debate estéril" en pro de las necesidades de los ciudadanos.