Alejandro Ruiz (C’s): “Esto ya no es blanco o negro”.  Morales (Ahora): “Deseamos que sea una legislatura de diálogo”. Jiménez (PSOE): “La ciudad pedía un cambio”. Guarinos: “No a la demagogia y la utopía como compañeros de viaje”.

 Los portavoces municipales hicieron uso de la palabra antes del discurso de investidura a cargo del nuevo alcalde.

Alejandro Ruiz, por Ciudadanos, comenzó por decir que ya no estamos en tiempos de mayorías absolutas en las que “todo es blanco o negro”, por lo que tiene que empezar un tiempo de diálogo, “pero de verdad”. Prevé una legislatura difícil, que se podrá sacar adelante a base de diálogo y trabajo. Añadió que a “Guadalajara le queda mucho por hacer” y dijo que su grupo priorizaría sobre todo los social, “estando atento a las personas que peor  lo pasan”.    

José Morales, por Ahora Guadalajara, admitió que habían trabajado para cambiar el gobierno municipal, no lo han logrado, y deseó que lo que venga sea por el bien de la ciudad. Destacó que son la fuerza política que más crece y deseó que sea una “legislatura de diálogo”, porque el PP ha perdido su mayoría absoluta y cinco concejales. Avanzó que desde la oposición “defenderán lo público”. Sobre el acuerdo entre PP y C’S para la investidura, dijo que no les había gustado como se ha desarrollado, porque “no es cambio ni regeneración democrática”.  Más allá de las competencias,  dijo que la prioridad debe ser la lucha contra el desempleo y  la emergencia social. Dio por hecho que el PSOE gobernará la Junta de Comunidades. Y reclamó un mayor control de las contratas municipales y pidió que se excluya de ellas a las que trabajan con ETTs.

Daniel Jiménez, por el PSOE, comenzó por decir que la ciudad había demostrado que quería un cambio que la anterior mayoría absoluta no supo resolver.  Abogó por la defensa de los que menos tienen, por las becas comedor y considera que en la ciudad “hay mil cosas por hacer”. Pidió que se constituya el Consejo Social y de Sostenibilidad de Guadalajara, que lleva 8 años sin reunirse y dijo que en este ayuntamiento ha sobrado dirigismo y que faltan acuerdos. Aludió a que  a él nadie le obligó a ser el candidato y a que fue elegido en unas Primarias.También reclamó la limitación de mandatos a ocho años, la incompatibilidad del ejercicio público con la actividad privada y que el alcalde tenga tres escoltas ocupados.

Ana Guarinos, como portavoz del Grupo Popular, agradeció a Román los 8 años que lleva como alcalde “en los que ha dado un cambio a la ciudad”. Aludiendo al comentario de José Morales, dijo que no sabía PSOE y Podemos habían firmado ya el pacto de investidura, por lo que la presidenta todavía seguía siendo Dolores Cospedal, allí presente. [También estaba en la sala  el diputado de Podemos por Guadalajara, que a  la postre va a ser decisivo en el previsible cambio de rumbo de la región] Guarionos alertó contra la “demagogia y la utopía como compañeros de viaje”. Y precisó que si prima el interés general “nos podremos  encontrar” en esta legislatura.