Emoción y riesgo en el encierro de Brihuega que acabó con 4 heridos

Uno de los toros empitonó al otro y acabaron tumbando la valla de una finca. Los que allí estaban tuvieron que encerrarse en la casa y dos corredores acabaron en el tejado./ Foto: Guadalajara Diario. Cuatro personas han sido trasladadas al Hospital de Guadalajara, dos de ellas con heridas por asta de toro en el encierro celebrado en la tarde de ayer en Brihuega, declarado Fiesta de Interés Turístico Regional en 2009 y considerado uno de los más antiguos de España. Durante el encierro se vivieron momentos de emoción, no exentos de peligro. GALERÍA FOTOGRÁFICA EN EL INTERIOR

El herido más grave del encierro de Brihuega evoluciona favorablemente

No hubo tanta gente como en los encierros de Brihuega de 2014 y 2015, que coincidieron con el fin de semana, pero en cualquier caso fueron varios miles las personas que se acercaron ayer a Brihuega para participar, o simplemente ver, el encierro de campo más tradicional y multitudinario de los que se celebran en la provincia de Guadalajara. La Guardia Civil cortó los accesos a Brihuega unas dos horas antes del encierro en puntos más alejados que en años anteriores.

Algún corredor acabó en el suelo en la salida de los toros hacia el campo. / Guadalajara Diario. Fue el primer encierro de esta etapa moderna que no tuvo la presencia de los toros de Sopeña. Y en recuerdo del ganadero, que falleció hace apenas un mes, varios caballistas llevaron lazos negros. Los toros fueron esta vez de Campo Bravo Alcarreño de Brihuega, cuatro ejemplares de buena presencia, con trapío y cuernos astifinos, que dieron un buen resultado en el campo. Sus nombres:'Tanguista', con el número 31; 'Jabato', con el 33; 'Romerito' con el 63, y 'Manzanita', con el 71.

El encierro comenzó muy bien, porque pudimos ver bonitas carreras en el recorrido urbano que va desde la plaza de la Muralla hasta la salida del casco por la Alameda. En el último tramo, en cuesta, los mejores corredores dieron alguna exhibición de cómo se debe correr delante de los pitones.

Los cuatro toros enfilaron juntos la carretera de Villaviciosa, pero solo uno de ellos mantuvo el ritmo y acabó subiendo al llano. Desde allí corrió varios kilómetros en dirección al pueblo de Villaviciosa, y sobre las once de la noche varios mozos y personal de la organización intentaban que volviera al pueblo para participar en la bajada.

Los toros estuvieron en todo momento muy arropados por los corredores./ Guadalajara Diario. Los otros tres toros hicieron la "fiesta" en los alrededores de Brihuega. A última hora de la tarde, uno de ellos volvió al casco y acabó encerrado en los corrales de San Felipe. Y los otros dos astados hicieron de las suyas, y pasadas las 21,30 horas todavía no se había logrado encerrarlos en San Felipe.

Fueron estos dos toros los que dejaron los momentos más emocionantes. Y también los que provocaron la mayoría de los heridos. La situación más peligrosa se vivió junto a una de las últimas naves cuando un veterano mozo arriesgó demasiado al tratar de citarlo con una bandera, y toro y corredor acabaron en un zarzal. El toro se revolvió y le tiró varios viajes, aunque afortunadamente ninguno de ellos fue fatal. Al final fue liberado y trasladado por las asistencias hasta el Hospital de Guadalajara.

Cualquier sitio vale para ver el encierro./ Guadalajara Diario21 personas atendidas y cuatro al Hospital

El otro momento que se vivió con más emoción los protagonizaron también estos dos toros. Uno de los astados empitonó al otro junto a una alambrada, y por la fuerza descomunal de los toros la alambrada fue tumbada. Astados y cabestros pasaron a la finca, por lo que los que estaban en ella tuvieron que refugiarse apresuradamente dentro de la casa. Dos corredores acabaron sobre el tejado de la vivienda. Uno de los toros atacó a uno de los coches aparcados, pero al final acabaron saliendo de la finca sin nuevos sobresaltos.

Este corredor protagonizó uno de los momentos más peligrosos del encierro. El toro le siguió y acabaron ambos en un zarzal./ Guadalajara Diario.Según ha informado la Cruz Roja de Guadalajara en su cuenta oficial de Twitter a últimas horas de la tarde, el balance provisional del festejo taurino ha requerido un total de 21 atenciones de los facultativos sanitarios, habiendo sido trasladados cuatro de ellos al centro hospitalario, dos por cornada.

Cruz Roja ha movilizado ocho ambulancias, un puesto de Atención Sanitaria y 50 voluntarios para este encierro.

La Guardia Civil buscaba a un caballista que arrolló de gravedad a un espectador, y luego se dio a la fuga.

A las tres de la mañana, había un toro cerca del monolito de la batalla de Villaviciosa, que no había manera de hacerlo bajar. Y otro más al final de las naves del pueblo. En los corrales de San Felipe de encerró a un tercero, que acabó muriendo allí, y otro más que llegó muy cansado, con lo que su particiapación en la Bajada de hoy es muy complicada.