El delegado de la Junta en Guadalajara, Alberto Rojo, espera que el camino iniciado ahora en el Congreso se materialice en una normativa nacional que impida los cortes de luz.
El Plan contra la Pobreza Energética impulsado por el Gobierno regional ha llegado en su primer año de funcionamiento a 3.160 personas de la provincia de Guadalajara, a través de 850 ayudas directas de emergencia energética destinadas a familias en situación de pobreza severa. Además, se han realizado 12 intervenciones para paralizar cortes de suministro y reposiciones inmediatas de servicio.
El delegado de la Junta en Guadalajara, Alberto Rojo, ha puesto de manifiesto que el Plan impulsado por el Gobierno regional a finales del año 2015 nació con el objetivo de que “a ningún hogar de Castilla-La Mancha, cuyas personas se encuentren en situación de pobreza, se les puede cortar el suministro energético”.
En este sentido, Alberto Rojo ha mostrado su confianza en que “el camino iniciado ahora en el Congreso se materialice en una normativa nacional que impida los cortes de luz” ha dicho, y ha añadido que “todas las familias de España en situación de vulnerabilidad merecen tener la garantía que ahora tienen las de Castilla-La Mancha respecto al suministro eléctrico”.
El delegado de la Junta en Guadalajara ha recordado que el Plan puesto en marcha por el Gobierno regional hace ahora un año se lleva a cabo en colaboración con Cruz Roja y con los Servicios Sociales de Atención Primaria e incluye cuatro líneas de actuación, que comprenden ayudas económicas de 150 euros, convenio con las energéticas para paralizar cortes de suministro, reposición en menos de 48 horas en caso de producirse y un plan de información a las familias sobre ahorro en el consumo energético.
En el conjunto de Castilla-La Mancha, el Plan regional contra la Pobreza Energética ha llegado a cerca de 25.000 personas a través de 7.199 ayudas de emergencia. Además, se han realizado 409 intervenciones para paralizar cortes de suministro o reposiciones.