Hay 4.233 vecinos más que hace un año y la mayoría de los que llega elige la capital para instalarse
Han llegado 4.000 vecinos nuevos que sube la población a 262.000 vecinos
Según los últimos datos del padrón publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) la provincia de Guadalajara tenía oficialmente 261.995 vecinos a fecha 1 de enero de 2019. Eso quiere decir que somos más que hace un año. Exactamente 4.233 vecinos más.
La mayoría se instala en Guadalajara capital
De los recién llegados, cuatro de cada diez, eligen la capital para instalarse
Pero todos se agolpan en las zonas del Corredor que debido a su crecimiento económico siguen ganando población. La mayoría de los llegados son hombres (2.305) y el resto (1.928) son mujeres. El mayor crecimiento se da en Guadalajara capital con 1.613 vecinos más. Esa cifra supone el 38 por ciento de todos los llegados. En este municipio están empadronados 87.484 personas frente a las 85.871 el año anterior. Son 1.613 personas más. Eso quiere decir que de cada diez que llegan casi 4 eligen la capital para instalarse.
De los municipios de más de 1.000 habitantes el que más crece es Tórtola con un 11,5%
Tras Guadalajara el mayor crecimiento se registra en Azuqueca y Yebes con 398 nuevos moradores en cada municipio. Le sigue El Casar que incrementa su población en 353 vecinos y Pioz, que crece en 300 nuevos habitantes. Le siguen de cerca Cabanillas con 215 nuevos vecinos y Marchamalo con 210. Pero el efecto Corredor se amplía y avanza hacia nuevos municipios. También crece Tórtola, Trijueque, Torija o Yunquera con 161 vecinos nuevos.
Listado municipios con más de 1.000 habitantes/ Fuente INE
Torija, el pueblo que más crece
Sin embargo, las cifras de vecinos cambian si lo analizamos en porcentaje de población. Comparando los cambios de empadronados entre 2019 y 2020 vemos que entre los municipios de más de 1.000 habitantes la subida más espectacular se da en Tórtola donde la población ha crecido un 11,6%. Le sigue en porcentaje Yebes con un 10,5% mas de población y Pioz donde ha aumentado el padrón en un 7,4%.
Yebes aumenta en un 10% su población y tiene ya 4.189 vecinos
En el resto de municipios con más de 10.000 habitantes las cifras son más moderadas. En Guadalajara la población aumenta un 1,8%; en Azuqueca un 1,14%; en Cabanillas un 2,06% y en Torija un 5,46%.
Menos población en Molina, Jadraque o Cifuentes
Sin embargo, hay municipios de más de 10.000 habitantes que no consiguen parar la sangría de la marcha de vecinos. En Jadraque hay 43 vecinos menos; en Molina hay 42 bajas; en Brihuega, ciudad que lucha por hacerse un hueco en el mundo turístico se han marchado 32 empadronados; en Cifuentes 11 y en Sacedón 10. La otra cara de la moneda está en Mondéjar que crece en 41 vecinos o el caso de Horche con 87 más.
Tordelrábano es el pueblo que más población pierde con un 57% menos
La sangría sigue lenta e inexorable en los municipios pequeños. Tenemos 180 pueblos con menos de cien habitantes. Angón, Valtablado del Río y Castilnuevo son los pueblos que menos vecinos censados tienen. Sólo 7. En Angón hay 3 vecinos menos que hace un año, casi un tercio menos. Destaca el caso de Tordelrábano que ha perdido 15 vecinos en doce meses. De los 26 que tenía en 2019 se han quedado en el padrón tan sólo 11. De hecho, es el pueblo que más población pierde con un 57% menos en solo un año.
En esa lista le siguen Ciruelos del Pinar, que ha perdido un 35% de población, o Herrería con un 20% menos. Una situación parecida hay en Alarilla, Castilnuevo, Sayatón, Salmerón, Prados Redondos o Yélamos de Abajo. Todos han perdido más de un 10% de su población. La lista es larga y desoladora.
En cuanto a municipios de cierta importancia hay situaciones desiguales: Cogolludo ha perdido 21 vecinos (un 3,8% menos) mientras Sigüenza, que aspira a ser Patrimonio de la Humanidad, ha conseguido 10 vecinos más, apenas un 0,23% más de censo.
La pandemia trae nuevos vecinos a los pueblos
Unos datos que ahondan en el fenómeno de la despoblación que parece imparable en Guadalajara. Unas cifras que podrían cambiar ligeramente a causa de la pandemia. A partir de marzo de 2020 son muchos los que han elegido pueblos pequeños y medianos para instalarse huyendo de los riesgos de contagio que supone vivir en una gran ciudad. Pero son datos que todavía no están contabilizados y que conoceremos a principios de 2022. Cuando el INE nos vuelva a dar los datos oficiales del año al que acabamos de dar carpetazo.
