Como una forma de denuncia de la violencia de género
Numerosos ayuntamientos e instituciones se están sumando a los actos del 25 N.
Marchamalo ha mostrado esta mañana de lunes su unión y repulsa ante todo comportamiento de violencia machista en el acto público que se ha convertido en un recuerdo a todas las víctimas de la violencia machista, y en especial a la niña de solo 15 años asesinada ayer en Orihuela, que es un ejemplo de todo lo que queda por hacer en materia de educación en igualdad.
El alcalde, Rafa Esteban ha realizado una declaración en este sentido, a la que ha seguido el del Centro de la Mujer Marchamalo y la lectura del manifiesto del Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha con motivo de este día a cargo de la Asociación de Mujeres de Marchamalo.
El acto ha finalizado con una dinámica de grupo organizada por los Servicios Sociales en la que han participado todas las personas asistentes, incluido un grupo de jóvenes del IES Alejo Vera.
En El Casar más de 200 personas se han dado cita en un acto cargado de simbolismo y compromiso social organizado por las asociaciones que componen el Consejo de las Mujeres por la Igualdad de El Casar.
El evento, presidido por la concejala de Bienestar Social, Igualdad y Mujer, y Presidenta del Consejo, Yolanda Ramírez, comenzó con la lectura de un manifiesto que subrayó la necesidad urgente de alzar la voz contra la violencia de género.
Tras la lectura del manifiesto, los asistentes guardaron un minuto de silencio en memoria de las víctimas. A continuación, un grupo de mujeres y hombres marcharon hacia el monumento de El Casar contra la violencia hacia las mujeres, donde sembraron plantas de lavanda como símbolo de esperanza y resiliencia.
El Centro de la Mujer de El Casar ha atendido, en el último año, más de 2.260 consultas en áreas como jurídica, laboral, psicológica y social, y ha promovido programas innovadores como el Plan Corresponsables, beneficiando a más de 350 niñas y niños.
43 sillas vacías en Cabanillas del Campo
El vestíbulo del Ayuntamiento de Cabanillas del Campo ha acogido este lunes 25 de noviembre el acto central donde estaban colocadas 43 sillas, que quedaron vacías posteriormente, por cada una de las víctimas de asesinato en 2024.
El evento se inició con la lectura del Manifiesto de esta jornada elaborado desde la Consejería de Igualdad de Castilla-La Mancha, centrado en que este año se conmemora el veinticinco aniversario en el que la ONU estableció el 25 N como el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer
Cada silla contenía la historia de una víctima. Los participantes leían consecutivamente cada una de las biografías y la desocupaban hasta completar la visión de esas 43 sillas vacías.
Estas 43 sillas, con los 43 nombres y relatos vitales de mujeres asesinadas, permanecerán durante los próximos días expuestas en la entrada del consistorio cabanillero, a modo de recuerdo y homenaje a las víctimas.
A Sigüenza solo le vale la cifra cero muertes
Esta mañana ha tenido lugar el acto institucional correspondiente al 25N en 2024, organizado desde el Centro de la Mujer de Sigüenza. La alcaldesa de Sigüenza, María Jesús Merino, y la concejala de Bienestar Social, Mujer e Igualdad, Conchi Huelves, se han hecho eco de la campaña que lanza el Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha: “Que la única cifra sea 0”.
Huelves le ha dado lectura al manifiesto para la eliminación de la violencia de género.
La alcaldesa, María Jesús Merino, ha recalcado que . “No debemos normalizar ninguna situación que suponga un ataque contra las mujeres, sea del tipo que sea: físico, verbal, psicológico o cualquier otro”. La regidora agradecía especialmente al Centro de la Mujer de Sigüenza su trabajo de concienciación y a la Guardia Civil su actuación.
Posteriormente los y las asistentes, que llenaron el salón del Centro El Torreón, visionaron varios videos de concienciación y e hicieron un sentido homenaje en memoria de las víctimas de violencia contra las mujeres, recordando con nombre y apellidos a todas las fallecidas en lo que va de año, sobre cuya esquela se depositó una vela encendida.