Azuqueca y Marchamalo, en el mejor momento. Foto: GUdiario.Ambos han logrado trece puntos en esta segunda vuelta
Azuqueca y Marchamalo progresan adecuadamente. Superados ya dos tercios de la competición, los dos representantes alcarreños en la Tercera División se encuentran, en la actualidad, en el mejor momento de su trayectoria con un colchón, si no definitivo, si importante sobre los puestos de descenso.
La verdad es que la evolución de ambos, gallardos y azudenses, llevado un cierto paralelismo en los puestos bajos de la tabla, tal vez mejor la del Azuqueca, que logró colarse en la zona media durante unas jornadas, aunque luego bajó para merodear con los puestos peligrosos. Mientras, al Marchamalo le costaba un mundo abandonar el farolillo rojo.
Todo cambió tras el derbi de la jornada 14, que se adjudicaron los rojinegros por 3-2 en el último instante. Una derrota que parecía dejar tocados a los gallardos, pero de la que se rehicieron a la perfección, con una victoria a la siguiente semana, superando al Valdepeñas. Tras la derrota en Toledo, vuelta a ganar, esta vez a un rival directo, como el Noblejas.
Gran derbi en el San Miguel. Foto: GUdiario.
Mientras, los azudenses cosechaban tres empates seguidos. Total, que al término de la primera vuelta nos encontrábamos con ambos conjuntos con 16 puntos, dos de ventaja sobre el Noblejas, primer equipo en descenso.
Trece puntos
A partir de ahí, como decíamos, la evolución de ambos, con acelerones y parones, ha sido positiva en general. Los dos han logrado cuatro victorias y un empate en las siete jornadas transcurridas desde entonces, un total de trece de los veintiún puntos posibles.
La comparación da una idea de la recuperación. Y es que en menos de la mitad de los encuentros (7) ya han logrado casi los mismos puntos que en toda la primera vuelta. Al final, con 29 puntos en el casillero de ambos, el Marchamalo ocupa la decimoprimera posición, mientras que el Azuqueca es decimosegundo.
Aún queda liga para ambos. Foto: CD Marchamalo.
El colchón sobre los puestos de descenso no es malo, once puntos sobre un Valdepeñas que parece, junto a Noblejas y Manzanares, ya condenados.
Sin embargo, todavía no es suficiente. Quedan diez jornadas por disputar y nadie se puede dormir en los laurales; quedan encuentros complicados. Por poner un ejemplo, a Azuqueca le toca enfrentarse a Villarrubia, Socuéllamos, Quintanar o Albacete, mientras que los gallardos, en este tramo final, aún deben medirse a equipos de fuste como Quintanar, Cazalegas, Villacañas y, también, Atlético Albacete. Y en la jornada 31, a tres del final, La Solana acogerá el derbi provincial.
Pero, para eso, aún queda. De momento, lo dicho, Marchamalo y Azuqueca progresan adecuadamente. Que continúen así.
