Se están arreglando aceras y pasos de cebra. El pavimento se cambiará tras la Semana Santa
La calle Miguel Fluiters, en la parte baja de la Calle Mayor de Guadalajara, ha quedado hoy lunes, cerrada al tráfico y permanecerá así, si no hay cambios, hasta el viernes. El motivo son las obras de reparación de aceras y pasos de cebra que se están realizando por parte de la empresa que acometió los trabajos de reforma y que ya tienen desperfectos.
El concejal de infraestructuras, Santiago López Pomeda, explicaba la semana pasada que esos desperfectos iban a ser asumidos por la empresa ya que la obra se encontraba todavía en periodo de garantía. Unos trabajos que ya han comenzado.
Para una fase siguiente será el arreglo del pavimento de la calle que está muy deteriorado. En ese caso el arreglo se iniciará después de la Semana Santa y durará un mes. Un arreglo que no se puede achacar a la empresa que hizo la obra por lo que tendrá que ser abonado por el ayuntamiento de Guadalajara. La obra consistirá en cambiar el pavimento verde por un asfaltado negro con terminación en forma de adoquín como se ha puesto en la calle Arrabal del Agua.