La Otra Guadalajara (plataforma ciudadana integrada por Asociaciones de la comarca molinesa) se ha mostrado hoy en contra de que se hagan modificaciones en el proyecto del futuro Parador de Turismo de Molina de Aragón y han “exigido” a la secretaria de Estado de Turismo, Isabel Borrego, y a la presidenta de la Junta, María Dolores de Cospedal, que pongan en marcha las obras.
Jerónimo Lorente, portavoz de La Otra Guadalajara, en el transcurso de una rueda de prensa celebrada en la capital alcarreña, ha asegurado que la postura entre los molineses es muy clara:“El Parador es urgente y no se ha empezado, el Parador tenía un contenido correcto y no aceptamos ninguna modificación y mucho menos en los equipamientos y, por último, las razones de que se modifica para hacerlo rentable supone tomar a toda la comarca por tonta e idiota”.
En ese sentido Lorente asegura que “si yo vengo diciendo que los juguetes los traen los Reyes Magos o que por el mar corren las liebres y por el monte las sardinas y os pido que os lo creáis os estoy llamando tontos!". Según el portavoz “cómo va a ser un Parador más rentable quitándoles los servicios que le hace atractivo y reclama el turista. Di lo que quieras, pero no que será más rentable porque eso es ofendernos”.
Desde La Otra Guadalajara insisten en que sino aparece un proyecto de parador que en esencia sea el anterior van a adoptar una postura “radical y permanente” aunque coincida con campañas electorales.
Según Jerónimo Lorente “no estamos dispuestos a que a los políticos les salga gratis olvidarse de una cosa que tantas expectativas ha creado y que lleva más de ocho años esperando a que comiencen las obras”.
En una respuesta parlamentaria, el Gobierno avanzó que a "comienzos de la nueva legislatura se decidió someter el proyecto del parador de Molina de Aragón a su valoración y estudio por la Sociedad Estatal Paradores de Turismo de España S.A., a quien corresponde realizar la gestión y explotación de la Red de Paradores, dado que en un primer análisis se ha considerado inadecuado para una explotación racional y de viabilidad económica".
En resumen, que se va a reducir el número de camas porque el actual proyecto les parece inviable económicamente. Y La Otra no quiere.