La alarma del bar impidió mayores consecuencias
Las dependencias municipales también están en el punto de mira de los amigos de lo ajeno. El Centro de Ocio “Río Henares” fue objeto en la noche del miércoles al jueves de un robo en el que, afortunadamente, la cosa no pasó a mayores.
El ladrón (o ladrones) accedieron al interior tras forzar la puerta de entrada al edificio y, una vez allí, volvieron a hacer lo mismo con la puerta de uno de los despachos, donde sustrajeron un proyector. De ahí se dirigieron a la zona del bar, probablemente en busca de la recaudación de la caja registradora y más elementos de valor.
En ese momento saltó la alarma tipo “cero visión” que expulsa una densa niebla que impide la visibilidad. Esto les obligó a abandonar el local, por lo que el hecho se quedó ahí. El robo se saldó, por tanto, con los desperfectos en las puertas y el robo del mencionado proyector.