Conocí a Adolfo Suarez el año 1973 , cuando era director general de RTVE, en unas convivencias que tuvieron lugar en un residencia situada junto al embalse de Buendía. Contaba con poco mas de 41 años de edad y le recuerdo como una persona muy elegante, con el que coincidía alguna vez comiendo en la misma mesa.
Mas tarde en 1977 en la UCD , en aquella coalición de partidos políticos de la que formábamos parte los democristianos , los socialdemócratas , los liberales y los independientes reformistas del franquismo, y en esas fechas mi primer contacto personal con Adolfo Suarez se produjo después de las elecciones en el mes de julio, cuando nos recibió a los secretarios provinciales del partido en la Moncloa.
Adolfo Suarez fue una extraordinaria persona, un gran político y el verdadero artífice de la transición, el líder de los españoles que nos llevó de la dictadura a la democracia, como el decía, "cambiando las tuberías sin que el edificio dejase de funcionar".
Fui diputado del Congreso por UCD cuando era Presidente del partido y de España y recuerdo cuando al regreso de un viaje que hizo a Irak en 1980, me hablaba, elogiando al embajador de España en aquel país, nuestro paisano nacido en Miedes de Atienza, José Luis de la Guardia y Maestro de León. Después sufrió los avatares políticos que le ocasionaron unas formaciones tan dispares en sus planteamientos ideológicos como las que formaban UCD, y en enero de 1981 se vio obligado a presentar la dimisión como Presidente del Gobierno.
Nadie olvida su actuación en el secuestro del Congreso de los Diputados el 23 de febrero de 1981 por el teniente coronel Tejero, su valor y su hidalguía ante los golpistas que querían acabar con la democracia.
Hable varias veces con él, pues era una persona con una simpatía arrolladora, una de ellas en el palco del Estadio Santiago Bernabéu el 5 de junio de 1982. Ese día jugaban al fútbol las selecciones de España e Inglaterra, me encontraba allí como Vicepresidente de la Comisión Parlamentaria de Seguimiento del Mundial, acompañado de los diputados Antonio Delgado de Jesús de Sevilla y Joan Sabate Escudé de Tarragona,y nos comunicó que había abandonado UCD y que iba a formar otro partido político de centro al que nos invitaba a incorporarnos. Le comenté que a partir de ese instante todo sería muy distinto para los políticos que estábamos en Union de Centro Democrático y que debería de haber continuado con nosotros.
Estuvo en Guadalajara en las elecciones de 1982 haciendo campaña por el CDS y no volví a verle hasta el 12 de octubre de 2002 en el Palacio Real de Madrid , donde acompañado de mi esposa acudí a la recepción que el rey daba entre otros a los alcaldes de capitales de provincia. Tuve ocasión de saludarle y charlar con él unos minutos y al preguntarle como se encontraba me dijo que "muy triste y solo"; su mujer, Amparo, había muerto en el mes de mayo de 2001, años más tarde en el 2004 y de la misma enfermedad falleció su hija Mariam.
La ultima vez que tuve la oportunidad de hablar con Adolfo Suarez fue el 26 de diciembre del año 2002, con motivo del funeral que en la catedral de la Almudena de Madrid, se ofició por Iñigo Cavero Lataillade, ministro de sus gobiernos en las carteras de Educación y Ciencia, Justicia y Cultura.
Su ultimo acto publicó tuvo lugar el 2 de mayo del año 2003, cuando en Albacete intervino en un mitin para apoyar la candidatura de su hijo a la Presidencia de la Comunidad de Castilla-La Mancha. En ella se evidencio el avance de la enfermedad que padecía, se perdió varias veces mientras leía sus notas y llegó a leer en varias ocasiones el mismo folio.
Adolfo Suarez fue nuestro guía hacia la Transición, pasados los años de la confrontación electoral todos los partidos políticos y los españoles, han reconocido la importancia y la honradez de una persona que por méritos propios pasará a figurar en un lugar preminente de la historia de España, como un patriota, gran estadista pieza clave en la transición española y que posibilitó en esos difíciles años el consenso y la libertad, abriendo el camino hacia la Constitución de 1978.
JOSÉ MARÍA BRIS GALLEGO
Ex diputado de UCD en el Congreso.
