Y mucho público que aguantó lluvia hasta las dos de la madrugada. Ámplia galería de fotos
Todos pendientes de los radares meteorológicos en Guadalajara. Porque la amenaza era muy grave para que los pasos de María Santísima Esperanza-Macarena y Jesús de la Salud pudieran procesionar.
Añ final una tregua en las lluvias permitió la salida unos cuarenta minutos más tarde de lo previsto. Pero la Hermandad de la Macarena decidió acortar el recorrido de los pasos para que no hubiera que proceder al regreso con celeridad.
Ásí, tras la dificultosa salida que tiene desde la parroquia de Santiago, se dirigieron a la calle Sinagoga para llegar al Palacio de La Cotilla, pasar ante el convento de las Carmelitas y regresar a su sede.
La salida tiene especial dificultad, puesto que es la única iglesia que está por debajo del nivel de calle y por tanto los costaleros tienen que salvar las escaleras internas de la parroquia de Santiago, lo que provoca una espectacularidad añadida a la procesión.
La imagen de la Virgen de la Esperanza-Macarena fue labrada en un taller de Córdoba en 1950 por el maestro Manuel Romero y la restauró Antonio Martínez en 1993.
Esta cofradía fue impulsada originariamente por los agentes comerciales de Guadalajara cuando superados los años duros de la postguerra, en la década de los cincuenta, se crean varias cofradías para revitalizar la Semana Santa de Guadalajara.
Galería de fotos de Eduardo Bonilla.