El ministro de Turismo informa que ya se están realizando las obras de reparación
El ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, ha confiado en que la inauguración del Parador de Molina de Aragón se lleve a cabo "lo más pronto posible", tras cancelarse el pasado 5 de septiembre debido a los daños provocados por la última Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA), aunque no ha concretado fecha.
Así lo ha señalado a preguntas de los medios este miércoles durante una visita al centro de producción de Mahou San Miguel en Alovera para conocer la hoja de ruta de descarbonización de la compañía, que ha sido beneficiaria de los PERTE de descarbonización.
"En estos momentos se están ya encargando las obras de adecuación y es evidente que todos tenemos muchas ganas de inaugurar con plena normalidad el Parador de Molina de Aragón", ha afirmado Hereu, quien ha admitido que "una de las grandes prioridades" en el campo del turismo es "desconcentrar los destinos en España y diversificar la oferta".
"Espero que no tardaremos mucho, pero las cosas se tienen que preparar para que su inauguración sea todo un éxito" ha agregado el ministro, quien ha precisado que las obras que se están acometiendo no son de gran calado, sino que se trata de "adecuar algunos elementos técnicos".
El Parador de Molina de Aragón será el número 98 de la red nacional. A principios de julio, el propio Hereu anunciaba su apertura en un acto en el que también estuvieron presentes la presidenta de Paradores, Raquel Sánchez; el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page; el alcalde de Molina de Aragón, Francisco Javier Montes; y el director general de Turespaña, Miguel Sanz.
La construcción de este parador fue un compromiso del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero para dinamizar la economía de esta zona, tras el devastador incendio de Guadalajara en 2005, en cuya extinción fallecieron once miembros de un retén forestal y se calcinaron más de 13.000 hectáreas.
Más de 22 millones de euros de inversión
Se espera que este nuevo establecimiento sea un dinamizador del territorio, una opción de turismo de calidad y excelencia, que contribuya a la actividad económica de la zona y a la generación de empleo.
El Gobierno de España ha invertido más de 22 millones de euros en su construcción. Se trata de un edificio de nueva planta, orientado hacia el Castillo de Molina, en la zona alta.
La construcción ha quedado integrada en el paisaje gracias a los materiales utilizados, con la piedra como elemento principal, uniéndolo con la muralla que rodea al Castillo y con la imagen tradicional de las casas molinesas.
El establecimiento tiene 7.000 metros cuadrados en una parcela de 42.000. Dispone de tres plantas con 22 habitaciones que cuentan con bar-cafetería, comedores, dos salones de convenciones con un aforo de entre 300 y 500 personas, salones sociales, jardines y aparcamiento para 60 vehículos.
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Inundaciones en el Parador de Molina antes de su inauguración
EFE