Los promotores de la Ciudad del Transporte calculan que las máquinas estén trabajando en este importante proyecto antes de finalizar el año, según han informado fuentes de Hercesa a GuadalajaraDiario. La Ciudad del Transporte es una actuación urbanizadora de 2.147.000 metros cuadrados para un sector industrial logístico a caballo entre Guadalajara y Marchamalo y por el que se implantará una plataforma intermodal que promueve una sociedad participada por Hercesa y que tiene como socio principal al puerto de Tarragona, que traería desde allí su mercancia para luego ser distribuída en la zona centro. El proyecto original ha sufrido numerosos aplazamientos como consecuencia de la crisis, pero ahora parece que todo está listo para que las obras se inicien antes de finalizar el año.
Ya se ha firmado el convenio con los dos citados ayuntamientos para que se pueda adjudicar el Plan de Actuación Urbanística (PAU) y a partir de entonces las obras pueden comenzar formalmente. Lo último:se quiere que las máquinas entren antes de final de año y el objetivo es completar una primera fase por la que se podría ejecutar en torno al 40% del proyecto de urbanización, precisan estas mismas fuentes, y luego se acometería la terminal intermodal (espacio en el que los trenes de mercancías descargan y conmutan con los diferentes transportes por carretera) para lo que ya cuenta con la inversión comprometida por las autoridades que gestionan el Puerto de Tarragona.
Un largo y tedioso proceso retrasado por la crisis
El Ayuntamiento de Guadalajara aprobó por unanimidad en sesión plenaria celebrada en abril de 2013 el Programa de Actuación Urbanizadora sobre la "Ciudad del Transporte", uno de los proyectos logísticos más ambiciosos y que ha sufrido un considerable retraso por la crisis. Se construirá en el entorno de la estación de Ferrocarril sobre unas 200 hectáreas. Meses después, el proyecto cumplía con otro requisito al recibir en octubre de 2013 el visto bueno de la Comisión Provincial de Ordenación del Territorio y Urbanismo de Guadalajara la actuación urbanizadora SP-PP-100, que así se llama técnicamente la “Ciudad del Transporte, y se manejó como fecha para iniciar las obras el verano pasado.
En el año 2003, antes de las elecciones, los entonces alcaldes de Guadalajara y Marchamalo, Jesús Alique y Rafael Esteban, firmaban el convenio de colaboración para su desarrollo, puesto que sus 2 millones de metros cuadrados de superficie se reparten casi a partes iguales entre ambos municipios. El tedioso proceso administrativo que ha sido necesario para llevarlo a cabo requirió, entre otras cosas, la redefinición de los límites de ambos términos municipales y la reordenación de su trazado original teniendo en cuenta la previsión del posible hallazgo de restos arqueológicos de época romana en su entorno, dado que abarca una parte del conocido paraje de El Tesoro en Marchamalo, donde se emplazó la antigua población de Arriaca, según algunos historiadores.
El proyecto nació antes del pinchazo de la burbuja inmobiliara con evidente optimismo. Se anunció como el centro logístico intermodal más grande de la Península Ibérica y se auguraba la creación de un millar de puestos de trabajo directos y otro millar indirectos, "expectativas que debemos tener en cuenta que se configuraron a medio y largo plazo, cuando el proyecto esté desarrollado totalmente", puntualizaba en octubre de 2013 el alcalde de Marchamalo.
