Las familias se enfrentan a unos gastos mensuales de 250 euros
La zona de Sacedón no tiene ruta escolar.
La veíamos sola en la estación, abrigada entre la nieve mientras se acercaba, lento, el tren que debía recogerla. Seguro que se acuerdan de Kana Harada, aquella estudiante japonesa que esperaba cada día su tren para ir al instituto. Su historia se hizo viral cuando se supo que era la única pasajera del convoy y la compañía ferroviaria había decidido mantener el servicio hasta que Kana se graduara.
Los chicos y chicas de Sacedón no lo tienen tan fácil como aquella joven japonesa. Una vez que terminan la ESO en su instituto los alumnos que quieran ampliar estudios, ya sea de Bachillerato o de Grado Medio, deben desplazarse a Pastrana…pero no tienen nadie que les recoja. Ni en tren, porque hasta allí no llega el ferrocarril, ni tampoco en autobús, porque rutas escolares no hay. Ninguna.
Esta es la denuncia que ha hecho pública un grupo de madres y padres de la zona, familias que sienten que sus hijos no tienen las mismas oportunidades de acceso a la educación que el resto de otros entornos. Y es que, señalan, en municipios también adscritos a Pastrana, existen rutas escolares de la ESO cuyas plazas vacantes son ocupadas por jóvenes de enseñanzas no obligatorias cuando se desplazan a estudiar a la Villa Ducal. El transporte, entonces, les resulta gratuito.
Instituto ESO "Mar de Castilla", de Sacedón. Foto: Google Views.Sin embargo, ellos deben financiar el autobús de su propio bolsillo. “Como en Sacedón tenemos instituto no disponemos de ruta escolar, estamos en una zona abandonada, no tenemos nada para que los alumnos de enseñanzas no obligatorias puedan viajar fuera” explica María Ángeles Palomino, una de las madres afectadas.
Transporte privado
La empresa privada contratada realiza el servicio a Pastrana durante diez meses, de septiembre a junio. El coste se divide entre el número de niños que lo utilicen, por lo que las cuentas están claras: cuantos más estudiantes, más barato. Ahí, la despoblación juega en contra de las familias “Antes había muchos niños, más de veinte, pero los pueblos, cada vez se quedan con menos gente. El año pasado nos costaba el transporte 198 euros al mes y este próximo curso ya van a ser 230. Íbamos a ir 14 chicos y chicas, pero una familia ha dicho que no puede pagar ese dinero, con lo que solo van a ir 13 estudiantes”, asegura Palomino.
No hay rutas para los que quieran estudiar fuera de Sacedón. Foto: Archivo.
El asunto tiene, además, otras implicaciones, porque la situación no solo afecta a las familias de Sacedón. Engloba a un área donde se encuentran Córcoles, Alcocer, Millana, Salmerón, Pareja, Buendía y Auñón. La ruta tiene la salida en Sacedón todas las mañanas a las 8:10 h, y retorna al origen a las 15:45 h. Los alumnos que viven en otros pueblos deben madrugar para que sus familias les acerquen hasta Sacedón y, después, venir a recogerlos, lo que aumenta el costo a final de mes.
Las familias se quejan de agravio comparativo ya que, afirman, en otras localidades, a pesar de no haber rutas gratuitas, existen medios de transporte con un amplio horario, disponen del plan Astra o tienen el denominado “transporte sensible a la demanda”. Las madres alegan también que no disponen de ninguna subvención para atenuar sus gastos, ni pueden, tampoco, optar a las becas de transporte.
No hay transporte escolar fuera de Sacedón. Foto: Archivo.
El delegado de Educación de la Junta en Guadalajara, Ángel Fernández Montes, contradice a las familias en este sentido. “Tienen opciones a becas por parte del Ministerio, aunque sé que no cubren todo. Además, hay otras administraciones implicadas, la administración regional, local o provincial; en algunos municipios los ayuntamientos aportan una parte; se pueden pedir ayudas complementarias”
En cualquier caso, la Delegación señala que la solución al problema del transporte con los estudiantes de Sacedón ya está encima de la mesa. “Estamos trabajando; ya dijimos a las familias que está en manos del gobierno regional el hecho de que el transporte para el alumnado de bachillerato y grado medio pueda ser gratuito, al igual que lo está siendo para el resto de enseñanzas”, explica el delegado de Educación.
Delegación de la Junta en Guadalajara. Foto: JCCM
El problema es cuándo. Según Fernández Montes, en el primer trimestre del curso no va a ser posible, con lo que las familias, al menos hasta diciembre, van a tener que seguir abonando el transporte de su propio bolsillo. El obstáculo se encuentra en los presupuestos regionales “en los de este año no está contemplado. Se está trabajando para que, a partir de enero, se les pueda dar una respuesta” declara Ángel Fernández, que se muestra optimista con la solución a este problema.
Despoblación
La cuestión es que la denuncia de las familias de Sacedón no es, sino, una expresión más del problema de la despoblación en la provincia de Guadalajara. Si no hay habitantes no hay servicios y, si no hay servicios, la gente se va. ¿Por dónde atajar el problema? “Muchas familias toman la decisión de abandonar sus casas y a partes del núcleo familiar en los pueblos, optando por marcharse con los hijos a la ciudad para darles mejor educación y futuro en detrimento de la estabilidad familiar”, afirman los afectados en un comunicado.
El problema es que “no todos pueden permitirse el huir de sus municipios, ni costearse un alquiler o una residencia de estudiantes”. Todo esto lleva a una “despoblación cada vez mayor en las zonas rurales, en parte, provocado por la falta de servicios y recursos para el futuro de nuestros jóvenes”. Estocada. “Lo que que repercutirá además en un envejecimiento más acelerado de nuestras poblaciones”. Puntilla final.
Sacedón es solo uno de los afectados. Foto: Google Views.
Precisamente las familias señalan la nueva Ley de Medidas contra la Despoblación de Castilla La Mancha del 2021. En su artículo 30, la norma recoge que el acceso al servicio público educativo “garantizará una educación pública de calidad en el medio rural" y, en particular, se propiciará, “una adecuada escolarización y mejora de los resultados educativos en el territorio rural, garantizando el acceso en igualdad a niveles superiores educativos, así como la igualdad de oportunidades con respecto a las personas que viven en el medio urbano”. Palabras mayores de ley.
A este respecto, el delegado provincial de Educación señala el trabajo del Gobierno regional en el transporte escolar en toda la región y, más concretamente, en Guadalajara “estamos haciendo un esfuerzo grande en una provincia con una alta dispersión y solo tenemos un caso puntual, que es el de Sacedón. Nosotros hacemos un esfuerzo y apoyamos el transporte, lo hemos hecho aquí, en Sigüenza, en Molina…pero llega un momento en que no hay alumnado”
De nuevo la pescadilla y la cola. “Hace unos años incorporamos aquí, en Sacedón, un programa de FP básica y Grado Medio de Informática y no se puede impartir ninguno por falta de alumnado. Es tan poco el número de estudiantes que no es posible crear institutos en todas las zonas. Estamos dando unas enseñanzas básicas para que los alumnos no se desplacen de su entorno, pero en lo que no es obligatorio, hay situaciones que tendremos que ir mejorando poco a poco…” afirma Ángel Fernández Santos.
Y mientras ese poco a poco sigue corriendo las familias continúan esperando y actuando. Conversaciones con políticos, declaraciones, una reclamación ante el Defensor del Pueblo. Pero septiembre está a la vuelta de la esquina, el curso escolar se echa encima y, de nuevo, habrá que hacer malabarismos con la economía, al menos hasta enero… todo para que los más jóvenes no dejen de estudiar.
