-CIZAÑA- 

         Para JESUS FERNANDEZ VAQUERO, secretario de Organización del PSOE en Castilla-La Mancha, por su empecinamiento en justificar la espantada de los disputados regionales socialistas en el Pleno de las Cortes Regionales, antes de pronunciarse sobre si mantener o no los privilegios de don José Bono, como comportamientos normales en la refriega política.
        Lo digo, más que nada, porque igual es verdad que esa manera de actuar, ese intercambio de votos y apoyos mezclando manzanas con peras, sea lo normal entre los políticos profesionales y quizás por eso cada vez se hace más grande la barrera entre esos seres superiores y el ciudadano de la calle. 
       Desde luego,  los que estamos a este lado de la citada barrera sólo sacamos en claro que en tiempos de penuria económica un expresidente se lo lleva crudo por el morro y sin lógica explicación y eso a unos cuantos (entre ellos los diputados que no votaron y sus jefes) perece que les da igual. 
                                         

                              -JALEA REAL-

Para PEDRO RUBIO VAQUERO, alcalde de Espinosa de Henares, porque con su pública petición de cese para el viceconsejero de Fomento de la Junta me ha hecho recobrar un poco de la ilusión, que ya casi tenía perdida, sobre la capacidad de que los gestores municipales puedan actuar alguna vez sin someterse a las directrices del partido político al que pertenecen.
Bien es verdad que don Pedro es rara avis porque, aunque se presentó amparado en las siglas del PP,  es independiente y con unos antecedentes sindicales que hacían difícil que tragase mucho tiempo, sin saltar, tantos desaires sobre el futuro de los trenes entre Guadalajara y Sigüenza.
En fin, ya digo, un soplo de aire que, sin embargo, me temo que no será imitado por otros ediles porque desde que se puso de moda aquello de que quien se mueva no sale en la foto todos estos rebeldes, al final, son represaliados desde la maquinaria burocrática de los partidos .