Los concejales de la oposición no sabían si estaban votando la propuesta del PSOE o la del PP
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Así queda el equipo de Gobierno de PP y Vox en el Ayuntamiento
La sesión del pleno de hoy en el ayuntamiento de Guadalajara parecía un remake de “El camarote de los Hermanos Marx”. Lo ocurrido, y ya van dos plenos así, es difícil de contar: con concejales interrumpiendo porque que no sabían si estaban apoyando o no la subida del IBI y con una alcaldesa, Ana Guarinos, que se limitaba a leer una y otra vez el enunciado del punto sin aportar más aclaraciones a las dudas de los concejales.
Lo sustancial es que la subida del IBI para 2024 se ha aprobado, pero lo han hecho en medio de una votación caótica y llena de dudas donde los concejales de la oposición no sabían si lo que estaban votando era el proyecto de subida del IBI presentado por el equipo de gobierno o la propuesta de paralizar la subida del IBI que fue lo que se aprobó, con la abstención de Vox, en la última comisión de economía.
La situación ha llegado a tal punto de confusión que los concejales de la oposición no paraban de preguntar qué se estaba votando lo que ha provocado el enfado de la alcaldesa, Ana Guarinos, que ha calificado la situación de “vergonzosa y bochornosa” reprochando a la oposición que “querían provocar bronca”. De hecho, ha amonestado en varias ocasiones a las portavoces de PSOE y Aike amenazando a ambas concejalas con expulsarla del pleno, tras llamarlas al orden en dos ocasiones.
La votación se ha cerrado con 13 votos a favor, los de Vox y PP; y 11 en contra los del PSOE. Habrá que esperar a ver qué refleja el acta del pleno sobre el voto de la concejala de Aike Susana Martínez que, aunque estaba en contra, no ha ejercido su derecho al voto mientras pedía aclaraciones. La alcaldesa ha señalado que la votación de Aike ha sido abstención mientras que la secretaria del ayuntamiento señala que ha sido en contra. En todo caso la subida ha sido aprobada.
El amago de Vox ha quedado en nada
Este caos ha eclipsado el otro tema importante en el día de hoy: las dudas de Vox sobre si apoyar o no el subidón del IBI. Este grupo municipal hizo saltar todas las alarmas hace unos días cuando en una comisión del ayuntamiento de Guadalajara no apoyó a su socio de gobierno, el PP, y se abstuvo en la enmienda a la totalidad que presentaron los socialistas para evitar la subida del IBI en un 17% para el año 2024, pero todo ha quedado en nada.
Hoy Vox ha apoyado la propuesta del PP y ha justificado su decisión en que necesitaban tiempo “para conocer en profundidad el documento en cuestión”. Así lo ha señalado el portavoz, Víctor Morejón, que ha leído, bastante nervioso y con cierta dificultad para entenderle, el texto que su grupo había preparado para justificar porque primero rechazaban la subida y ahora la apoyan.
"Una vez facilitada toda la documentación hemos comprendido que estamos en una situación grave, que necesita de una solución para poder afrontar los gastos derivados de los servicios públicos”- ha justificado.
Morejón no ha hecho ninguna referencia a la explicación que portavoces de Vox dieron hace unos días: “que habían conocido el proyecto a la vez que la oposición”, algo que les molestó porque ellos forman parte del equipo de gobierno y se sintieron menospreciados.
Con este apoyo se consuma una importante subida del IBI del 17% para el año 2024, subida que va a suponer pagar 100 euros por una vivienda media según afirmó el concejal de Hacienda, Alfonso Esteban.
Con este incremento se recaudarán 4,3 millones de euros que servirán para resolver "la mitad del desastre" según ha explicado Alfonso Esteban quien ha recordado que hay un agujero de 12 millones de euros. “El presupuesto del 2023 no era normal. Lo que hoy aprobaremos solo cubre el 50% de lo que he comentado y hacer que los servicios públicos sean viables”- ha señalado.
PSOE: "Es un atraco"
La portavoz del PSOE, Lucía de Luz, que ha calificado la subida de “atraco” ha negado que exista un agujero económico en el ayuntamiento y le ha espetado a Esteban que se quite la capa de salvador de la ciudad “quítese la capa y póngase la media” le ha dicho Lucía de Luz, "nosotros tuvimos una guerra y una pandemia y no sableamos a la ciudadanía. Lo fácil es subir el IBI y no hablar con las empresas”.
Desde Aike, Susana Martínez, comparte con el PP, que la realidad económica no era la que presentaba el PSOE, pero cree que la solución no puede recaer en los bolsillos de los vecinos. “El PP lleva cuatro años en la oposición y ya sabíamos la situación que había en el ayuntamiento y a pesar de ello en la campaña prometieron no subir los impuestos y ahora no lo cumplen”. Por ello han defendido que una subida tan importante se haga de forma “progresiva y atemperada”.
Antes de la caótica votación la alcaldesa, Ana Guarinos, ha asegurado que se bajará el IBI “cuando la situación mejore, porque el dinero donde mejor está es en el bolsillo de los ciudadanos”- ha zanjado. También ha asegurado que el agujero dejado por los socialistas no es de 12 millones sino de 20 millones de euros.