NO HE APLICADO VARA de medir a los tres políticos que han intervenido por sus partidos en el Estado de la Región celebrado en Toledo el martes 15 de octubre, pero me parece que ha demostrado más talla y estatura, más alzada y dimensión Emiliano García-Page que los otros dos portavoces de PP y de Vox, los cuales si aplicáramos físicamente esa vara de medir posiblemente ganasen en centímetros al toledano, pero sólo en lo físico, probablemente.
Con el tiempo, Page ha ido adquiriendo una soltura y una desenvoltura, una pericia y una maña sobre el atril de los discursos que ya se le puede considerar un artista de la palabra moderada, sosegada, plácida y serena que sólo cabe ser agradecida en quien se presenta a sí mismo como un socialdemócrata progresista, pero reposado y tranquilo, sin radicalidades.
Francisco Núñez, el presidente del Partido Popular en la región es demasiado joven todavía y se apresura y se acelera al exponer sus argumentos, por lo que en el combate cuerpo a cuerpo con Page sale este ganando.
Tiempo tiene para intentar sobrepasarle, pero García Page y el Partido Socialista, hoy por hoy, parecen bastante asentados en la región, pase lo que pase en el Madrid y en la España de Sánchez, que es bastante y no todo bueno.
David Moreno, el presidente de VOX en las Cortes Regionales tampoco supera hoy en estatura parlamentaria a García-Page, aunque también su menor edad le da tiempo para consolidarse y platearse nuevas metas.
Y como todos ellos hicieron un llamamiento a la ciudadanía para aportar sus ideas para la mejora de la región, debo decirles que yo nací en Castilla la Nueva, superhistórica región española, quizá la más histórica de todas…
Y que sufrí después el impacto nominal de que me región apreciadísima fuera rebautizada sin que nadie lo pidiera ni a nadie se le permitiera un refrendo popular al respecto con el apelativo que ahora luce o la desluce, y que no quiero ni pronunciar.
Yo, cuando me tengo que referir a mi región, la denomino Castilla-La Comarca, porque eso es lo que realmente supone: el enlace mediante un guión de un antiguo reino soberano y una de sus veinticinco comarcas, si se trata de Castilla la Nueva, o de sus sesenta comarcas si nos refiriéramos a la totalidad de Castilla.
CASTILLA-LA COMARCA
ES EL NOMBRE MÁS real y más exacto, nada despreciativo –y mira que el sambenito bifronte se presta a mofas y facecias de toda índole- que he podido encontrar, y como tal me refiero a ella, a fuer de no olvidarme que la primera parte del binomio es un Estado Histórico de la máxima historicidad, y la segunda parte es una comarca o parte integrante de algo mayor, pero no ente político en sí mismo.
La Mancha es tan comarca de Castilla, que lleva incluso el marcador que el idioma castellano reserva para indicar que las comarcas lo son: todas las comarcas en castellano o español van precedidas por un artículo determinado (el, la, los, las), que indica su dependencia de una región política mayor: Castilla, en este caso.
No sé si este desaguisado que en la época de la Transición se perpetró deliberadamente para debilitar a Castilla por exigencia de los partidos nacionalistas-separatistas periféricos podrá subsanarse fácilmente o no.
Yo, de momento, me lo he subsanado personalmente el desaguisado con el nombre de Castilla-La Comarca, que nos indica lo que es “La” Mancha y que faltan otras veinticuatro comarcas más en la Nueva Castilla, para no agraviar a ninguna, ignorándolas.
EL CONSEJO DE COMUNIDADES CASTELLANAS
EL DÍA QUE SE REÚNAN con periodicidad prefijada los presidentes y presidentas de Castilla y León, Madrid y Castilla-La Comarca, como ya hacen de vez en cuando para tratar temas conjuntos de mutuo interés, se habrá dado otro paso fundamental para que el descabezamiento de Castilla exigido por los partidos nacional-separatistas periféricos en la Transición para destruir Castilla se subsane y aparezca en España en agente territorial que podría poner equilibrio y justicia en el ámbito autonómico español, la historicísima, pero dinamitada Castilla.
Que sea pronto, para bien de Castilla y León, Madrid y Castilla-La Comarca, que en conjunto representan casi el 40 % del territorio de España y su mayor población, lo cual es mucho peso en España, para que esté, como está ahora, desperdiciado.
Y por cierto, habrá que decirle a la portavoz del PSOE, que terminó el debate pidiéndonos perdón a los de Guadalajara por citar a Cervantes y a don Quijote, que no nos debe pedir perdón por nada de eso…
Al contrario, Cervantes en un paisano de la comarca de La Campiña del Henares, nacido en Alcalá de Henares, e incluso de la comarca de La Alcarria alcalaína que se mofó todo lo que quiso de la comarca manchega a la vez que escribía el más alto mito esencial de nuestra queridísima cultura castellana, muy apreciada también por lo que se ve por la citada portavoz regional del PSOE. ¡Que siga progresando en su admiración por la cultura de Castilla!