Sin noticias del PSOE sobre su candidato a la alcaldía de Guadalajara, y la cosa empieza a ser inquietante porque el 1 de noviembre está a la vuelta de la esquina y es el día en que los aspirantes deberían empezar a recabar oficialmente avales entre la militancia para ser candidatos. El único que ha dicho públicamente que se presenta es Ignacio Andarias, un militante de base que llegó al PSOE tras el hundimiento del CDS, y que en las últimas Primarias para la secretaría general del PSOE apoyó la candidatura de José Antonio Pérez Tapias, el líder de Izquierda Socialista. La candidatura de la concejala Araceli Martínez, que era bien vista por parte de la dirección provincial, aunque no contaba con el respaldo de la mayoría del grupo municipal, se pinchó en apenas dos días y ella se acabó quitando de en medio, aunque sin cerrar del todo la puerta. Porque en este PSOE de hoy en día lo que pueda pasar la semana siguiente entra de lleno en el género de la ciencia ficción. Después de lo de Araceli, corrió el nombre de un médico que ha ejercido varios cargos en el PSOE, y que supuestamente también era bien visto por Pablo Bellido y sus más cercanos colaboradores, pero después hablar personalmente con él, y decirme que en su cabeza no está ahora esa posibilidad, casi que ni voy a mencionar su nombre porque nos vamos a acabar enredando todos con el hilo de esta madeja de la que empiezan a tirar demasiados. Y ese es el problema, que ya he mencionado en post anteriores. En el PSOE de la capital, cualquier candidato que no goce del respaldo de Pablo Bellido y su equipo, de Jesús Alique y del tándem formado por Magdalena Valerio (mis mejores deseos de recuperación) y María Antonia Pérez León, tendrá grandes dificultades para lograr una candidatura de consenso. Pues ellos verán, porque algo conozco de la política alcarreña y les digo que nunca jamás en la historia del socialismo local se va a abordar un escenario tan adverso como el que se encontrará en mayo de 2015. Por primera vez, el PSOE no solo va a luchar por la alcaldía de Guadalajara, lo primero que tiene que garantizarse es seguir siendo el primer partido de la oposición bien sea frente a Podemos e Izquierda Unida, cada uno por un lado, o ante esa coalición de izquierda radical que se llamaría “Ganemos Guadalajara”. Si en una situación tan crítica como la presente, en la que el PSOE se juega seguir siendo partido de Gobierno en Guadalajara, no son capaces de cerrar filas y buscar un candidato de consenso, solvente, de prestigio profesional reconocido y peso suficiente para enfrentarse no solo a Román, sino al populismo izquierdista, es que han perdido todo sentido de la responsabilidad.
Y otra pregunta:¿Deberíamos dar por hecho que José Luis Blanco, secretario del PSOE azudense, es el único candidato a las Primarias de Azuqueca, tal y como anunció inopinadamente, aunque luego no ha dicho ni palabra más al respecto. ¿Y Bellido qué opina de esto?
He escrito que Román será el candidato, no creo equivocarme, y además debo reconocer una cosa. Su decisión formal de no anunciar su candidatura, que dice tener tomada –yo no pondría la mano en ese fuego–, le está viniendo objetivamente bien, siempre que funcione en las encuestas del gurú Arriola, que han sido el sucedáneo de las Primarias en el PP. Desconozco la última hora de estos sondeos, y pagaría una cena por saber qué otros nombres de políticos provinciales ha metido el encuestador en el hit-parade de los candidatos posibles. Tanto o más que el resultado, que tradicionalmente ha beneficiado a todos los alcaldes de Guadalajara, por ser el cargo más mediático de la política provincial. No me cabe la duda de que si Román finalmente quisiera, nadie se va a poner enfrente, pero cuando el alcalde sigue sin confirmarlo es que algunas cosas – seguramente si deja meter o no la cuchara en la lista electoral y cuál va a ser su papel en las elecciones Generales de fin de año-, no están tan claras. Y de ahí que quiera seguir manejando él solito los tiempos de su decisión.
Coda: Publicado este artículo conocemos que Pablo Iglesias ha ganado las elecciones internas de Podemos y eso significa esencialmente dos cosas: que él será el líder único y no habrá una dirección colegiada, como es habitual en el resto de los partidos -¡bienvenido a la casta!- y que se va a preservar el nombre de Podemos en las elecciones municipales, porque Iglesias no quiere riesgos en unas elecciones que no le convienen, todavía, porque no tiene una organización extendida por toda España como para poder enfrentarse con garantías a unas elecciones locales y autonómicas. Esto da alas a Izquierda Unida que liderará la coalición «Ganemos….» y ante la que Podemos se pone de perfil. Por lo que pueda pasar.
ME PREOCUPA LO DE MADRID.- Ahora que lo del ébola parece que está encauzado, cabe esperar un mayor avance en las negociaciones entre las comunidades de Madrid y Castilla-La Mancha sobre el convenio sanitario con Madrid. Aunque en Toledo, como siempre, siguen sin enterarse, porque es un problema que atañe fundamentalmente a Guadalajara — y eso quiere decir que no está en las primera hojas de la agenda política regional–, no hay en esta legislatura una decisión de tanta trascendencia para el ciudadano corriente. Ya son más del millar los guadalajareños que practican anualmente el turismo sanitario –y con ellos otros miles de familiares–, lo que quiere decir que si esto no se arregla es muy fácil que también le toque a usted alguna vez ir de excursión al hospital de Ciudad Real o Albacete, como el que va de campo a las Lagunas de Ruidera o a ver los molinos de Campo de Criptana. Me preocupa lo de Madrid, porque no tenemos noticia de que los Presupuestos de 2015 hayan reservado una partida específica para ello, por lo que es comprensible que la oposición guadalajareña socialista así lo demanda. Carecer de partida, significa que Echániz está negociando sin cash, es decir solo con contraprestaciones, aunque ya sabemos lo que dijo el consejero madrileño, que él quiere dinero y no estampitas. Así que yo también me quedaría más tranquilo, si se pudiera habilitar una partida significativa en los Presupuestos de 2015, y me daría más seguridad que esperar a que Page gane las elecciones para resolverlo, como prometen los socialistas para llevar el agua a su molino. En Guadalajara ya estamos cansados de promesas sobre este asunto, y si llegamos a la conclusión de que esto no tiene arreglo será porque nos hemos equivocado de autonomía y también deberían permitirnos el derecho a decidir. Yo, si vienen mal dadas, decido irme a un hospital de Madrid antes que a otros en Ciudad Real o en Albacete. Y les rogaría que no por ello me consideren un centralista de mierda. Con perdón.
FELICIDADES A FREIJO.-Pocas distinciones son tan merecidas como el premio nacional del Consejo Superior de Deportes al Ayuntamiento de Guadalajara por la promoción del Deporte. Con su concejal de Deportes, Eladio Freijo, hemos aprendido lo que son las sinergias de una competición deportiva para le economía de una ciudad y como puede ser más interesante para Guadalajara un campeonato del mundo de juvenil de un deporte raro que en Guadalajara interesa a cuatro gatos, solo porque con los chavales vienen los padres a los hoteles, mientras que con el absoluto ya les dejan salir de casa solos. Yo confieso a Freijo que apenas me interesan esos deportes exóticos que han tenido excelentes entradas en el Multiusos, y ruego que me disculpe por ello, pero en mi fuero interno siempre he alabado su capacidad para encontrar competiciones que han dejado una gran valor añadido a la ciudad. Enhorabuena, y si no fuera porque en la Cámara de Comercio están embargados y él día menos pensado les colocan las mesas en el Jardinillo, yo le daría una medalla al mérito y un Môet Chandon.