A medida que pasan los días, aumentan las posibilidades de que Alfonso Esteban Señor sea el candidato del Partido Popular a la Alcaldía de Guadalajara. Cualquier otra candidatura exótica, encabezada por un independiente famoso, cada día está más lejos, mientras que la opción natural de dar la alternativa al actual portavoz, Jaime Carnicero, vicealcalde con Román, está descartada desde el último Congreso Provincial del PP, al que en primera instancia se presentó sin éxito Carnicero, y que al final acabó coronando a Lucas Castillo, como presidente provincial, con Alfonso Esteban como secretario provincial, es decir, el número dos.
Según me llega de buena fuente, en estos momentos no se manejan más opciones, por lo que el anuncio de la candidatura de Esteban, podría hacerse al final del verano. De momento, tiene el apoyo de Ana Guarinos, al alza en el PP de Castilla-La Mancha desde su reciente cargo de coordinadora regional, y lógicamente de Lucas Castillo, el presidente provincial. El penúltimo paso es recibir la confianza del presidente regional, Paco Núñez, lo que es verosímil con esos avales. Al tratarse de una capital de provincia, la decisión final es de la Ejecutiva Nacional del PP, es decir de Feijóo y su equipo, pero no suele ocurrir que si un candidato viene avalado por su comunidad autónoma y su provincia, en Madrid se saque a otro candidato de la manga. El PP suele anunciar por bloques los candidatos a las capitales de provincia que han sido proclamados por la Ejecutiva Nacional, y no sería de extrañar que Alfonso Esteban esté entre los primeros. Aunque también es cierto que cuando el candidato no está en el grupo municipal, los que no van a seguir pueden caer en el desánimo y eso no sería bueno para un PP, que espera rebañar la representación de Ciudadanos y plantar cara al alcalde Alberto Rojo, el único candidato que ha sido proclamado por su partido.
A la izquierda del PSOE, José Ángel Morales, el edil de Unidas Podemos, parece que quiere dejar la política profesional después de haber hecho un buen trabajo en la portavocía, aunque a veces le pierda su radicalismo ideológico, y queda por saber qué pasará con los municipalistas de izquierda de Aike, que deciden sus asuntos en la asamblea, y que han tenido en Jorge Riendas a otro buen representante. El éxito de UP y de Aike, juntos o por separado, marcará en gran medida el futuro gobierno municipal, porque no es previsible que ni PSOE ni PP alcancen la mayoría absoluta (así lo detectan los sondeos), con lo que ambos deberán mirar a su izquierda y derecha más extrema para obtener la alcaldía; cosas de esta nueva-vieja política. Vox tampoco ha anunciado su candidato, siguiendo su estrategia de taparlo hasta el último momento, que no le ha salido nada bien en Andalucía, como reconoció el propio Santiago Abascal con Macarena Olona, un cuerpo extraño a Vox Andalucía. Los sondeos acreditan que Guadalajara es una de las provincias donde Vox tiene más expectativas, pero elección tras elección también marcan una tendencia decreciente de la formación de derecha radical y un impulso del PP de Feijóo, que pasa su primera reválida en mayo después del éxito de Juanma Moreno en Andalucía.
Por hoy, esto es lo que hay.
LAS CAMISETAS DEL DEPORTIVO.- No me convencen las nuevas camisetas del Deportivo Guadalajara con las que jugará la próxima temporada en segunda RFEF. La blanca con ribetes naranjas parece del Valencia, la azulgrana del Barcelona y la morada atravesada por una gruesa raya blanca a una película de cruzados. Pero lo que menos me gusta es ese escudo, con esa “D G” enorme, dispuesta a saltar de su marco, en contraste con el bellísimo logotipo castellano y arriacense que diseñó en su fundación el cuadro morado (?) con Alvar Fáñez de protagonista. Cada uno tiene sus gustos y los míos beben en la tradición en materia futbolística, lo siento. Pero dicho esto, los árboles no me deben impedir ver el bosque, y saber que lo importante es que la nueva propiedad del club está haciendo bien su trabajo, y es posible que esta temporada nos llevemos alguna alegría. No podemos olvidar que la Segunda RFEF no deja de ser la cuarta división del futbol español y que todavía nos queda superar a otra más (la Primera RFEF) para llegar hasta esa segunda categoría del fútbol español de la que disfrutamos durante dos años, de la mano de un gran Carlos Terrazas, hasta que la perdimos por la mala cabeza de alguno que quiso seguir solo en el castillo. Pero esto es lo que hay. Para llegar hasta allí, hay que ir paso a paso y sin hacer tonterías. ¡Aupa Deportivo!