Guadalajara se queda sin niños

España se queda sin niños. Guadalajara se queda sin niños. Esta es la gran noticia más allá de amnistías, autodeterminaciones y demás mandangas que nos endilgan el calendario político en España; es decir, Puigdemont. Por tanto, a él tendremos que recurrir y no a nuestros parlamentarios naturales, sombras espectrales diría el Tenorio, para ver cómo podemos parar la caída en picado de los nacimientos en España, que ha descendido el 27,6% en la última década, según los últimos datos del INE. Claro, que como a Puigdemont España le importa una higa, deberemos apelar a que una de las provincias con peor estadística es Barcelona y que el resto de provincias catalanas también están en negativo. Solo en 6 de las  52 provincias españolas están naciendo más personas que el año pasado, encabezadas por Madrid con un saldo positivo de 663 niños. ¿Tendrá algo que ver con el aumento de las políticas de natalidad que ha desplegado el gobierno de Ayuso o solo es por las buenas perspectivas económicas que hay en la comunidad vecina?

En Guadalajara, las cifras del INE muestran que en la provincia  nacieron hasta septiembre  1.116 niños por  1.435 en el mismo mes del año anterior, pero lo preocupante es que la curva ha tenido un descenso continuado en los últimos años. Así, en septiembre de 2016 nacieron 1.779 niños; 163 nacimientos menos en siete años. La tasa bruta de natalidad ha pasado del 12,5% en 1975 a apenas el 7,07%, un desplome que nos debería poner los pelos de punta. A finales de los 90 se produjo un bache y se recuperó en torno al año 2011, coincidiendo con la salida de la crisis financiera, pero a partir de ese momento la curva cae otra vez en picado, como pueden ver por este gráfico. Los datos deberían llevar a una revisión de las políticas en favor de la natalidad que despliegan nuestras instituciones locales, porque si bien la mejor política de natalidad es una buena situación económica, por encima de ayudas y subsidios, algo habrá que hacer para corregir una deriva que nos lleva a la insostenibilidad del sistema. Y eso que Guadalajara no es de las provincias peores de España, porque está seis décimas por encima de la tasa bruta de natalidad de Castilla-La Mancha y 19 décimas sobre la tasa nacional.

Un tercer factor alienta el invierno demográfico que se produce en España, como es que solo tres provincias (Madrid, Murcia y Almería) tienen un mayor número de nacimientos que de defunciones. En Guadalajara el ratio es de 0,82 nacimientos por cada fallecido, un dato objetivamente malo pero que aun así es el segundo mejor de toda Castilla-La Mancha. El invierno demográfico ha llegado tan lejos que en muchos territorios es irreversible, especialmente en el noroeste de España

El freno al desplome poblacional en Guadalajara lo soporta la inmigración, no la natalidad de sus naturales, y que es la que ha permitido que su población haya crecido un 2% más que hace un año. Los datos son elocuentes. La población en octubre de 2022 era de 272.715 personas. Doce meses después hemos pasado a convivir en toda la geografía provincial 278.255 vecinos. Son 5.540 más que hace un año. De esos 278.255 vecinos, 43.993 son extranjeros, un 15,4%, casi 4.000 más que hace doce meses. En ese tiempo la población española ha crecido apenas en 1.571 vecinos. En porcentaje, hay un 9% más de población extranjera frente a un 0,67% más de española.

Esto es lo que hay.

P.D.- Argentina ha elegido entre el salto al vacío que es Milei y la perseverancia en la corrupción y la inutilidad que representaba el enésimo candidato peronista. Yo no sé cómo acabará la historia de este tipo de la motosierra cuando llegue a la Casa Rosada, imagino que moderará el discurso y sus políticas, pero no me digan que escuchar a un presidente electo gritar en el cono sur, caldo de cultivo histórico de la autocracia,  “Viva la libertad, carajo” no es  emocionante.   

El Estado de Derecho descarrila en España

El 9 de noviembre de 2023 se produjo el ataque más relevante contra la Constitución española y los ideales de la Transición tras el 23-F de 1981, porque fue el día en que descarriló el Estado de Derecho en España al bajarse en marcha uno de sus maquinistas, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE). Un día que parafraseando a Roosevelt podría recordarse como el “Día de la Infamia”, después de que el documento firmado entre Junts y el PSOE (y que no se atrevieron a rubricar en persona Carles Puidemont y Pedro Sánchez) sobrepasa puntos esenciales de la Constitución, que si el progresista  Cándido Conde Pumpido, ex fiscal general con Zapatero, no lo impide, quedará para vestir santos.

Hay aspectos de ese documento que atentan directamente contra la separación de poderes y la independencia judicial, como ese concepto de Lawfare, que empezó  a utilizarse en América por Trump, como justificación a sus condenas judiciales por múltiples delitos y en España por el iliberal Pablo Iglesias, que hace tiempo salió del Gobierno aunque se encarnó ideológicamente en su presidente Sánchez. Ese uso del Lawfare lleva a decir en el infamante documento que “las conclusiones de las comisiones de investigación que se constituyan en la próxima legislatura  se tendrán en cuenta en la aplicación de la ley de amnistía en la medida que pudieran derivarse situaciones comprendidas en el concepto lawfare o judicialización de la política, con las consecuencias que, en su caso, puedan dar lugar a acciones de responsabilidad o modificaciones legislativas”. Esto significa que el Congreso se atribuye el papel que ahora ejercen los jueces, ya que podrás exigir acciones de responsabilidad. Todas las asociaciones de jueces, incluyendo las Juezas y Jueces por la Democracia -la cantera judicial de la izquierda- y todas las asociaciones de fiscales, incluyendo la Progresista UPF, en la que está la Fiscal de Memoria Democrática Dolores Delgado y el actual fiscal del Estado, Álvaro García, han reaccionado ante tal desatino impropio de una democracia liberal. La Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia de CLM, nuestro Supremo regional, dice tajantemente que “supondría el final de la separación de poderes en un Estado de Derecho que ha regido en España y la vida de los españoles durante los últimos 45 años”, sobre el fondo de la cuestión. Y ante esa posible constitución de comisiones parlamentarias: “Resultaría una intromisión hasta ahora inaudita en la labor de juzgados y tribunales, y un ataque frontal a la separación de poderes, que implicaría que el Poder Legislativo se convierta en supervisor del Poder Judicial”; y en última instancia un “grave menoscabo a los derechos y libertades de todos los españoles”.  En esa misma línea argumental, los Jueces Decanos de 79 partidos judiciales de España, entre los que se encuentra el de Guadalajara, advierten que tales comisiones podrían suponer la “revisión parlamentaria de los procedimientos y decisiones judiciales” y recuerda que el “Poder Judicial en España es independiente, no actúa sometido a presiones políticas y dispone de un sistema de garantías jurisdiccionales que aporta el riesgo que se apunta”. Por algo así, a Netanyahu le montaron en Israel una revuelta, que ahora ha tapado con su atropellada invasión de la franja de Gaza.

Tribunal Supremo, cuyo trabajo y sentencias sobre el Procés queda en nada tras la Ley de amnistía, y sus fallos cuestionados por posible lawfare./Foto: GUDiario.

El documento de la Infamia, toman nota los jueces, desmonta la separación de poderes en beneficio del Ejecutivo; y ya sabemos que no hay democracia que valga sin unas leyes que ordenen  y acoten su funcionamiento y ante la que se sometan sus cargos públicos. Con este concepto de lawfere se quiere presentar a los jueces españoles como unos prevaricadores, como si fueran los jueces que se cargaron las leyes democráticas de la República de Weimar ante la presión del gobierno nazi, y salpican incluso al rey Felipe VI, que salió en defensa de la Constitución y la unidad de España tras el golpe de Estado en Cataluña en 2017. Eso es lo que no toleran del Rey los separatistas, más allá de su presunto republicanismo. ¡Como si en Francia un presidente de la República les iba a consentir ni la cuarta parte de sus tropelías!

La soberanía para al Parlament.- El documento de la Infamia se salta en la práctica  el artículo 2 del título preliminar de la Constitución, que establece: ”La soberanía nacional reside en el pueblo español, del que emanan los poderes del Estado”. Y esto es así, porque la soberanía en el acuerdo se descarga sobre “el Parlament de Cataluña, que representa legítimamente al pueblo de Cataluña”. El parlament es por tanto, el titular de la soberanía de Cataluña, sin que el parlamento nacional o el resto del pueblo español tenga derecho a pronunciarse. El reconocimiento nacional de Cataluña lleva por el camino un referéndum, que propondrá Junts, como se avanza en el documento, párrafo en el que se cita a la Constitución como única vez y para colegir en su delirio que el artículo 92 ampara ese derecho. Juzguen ustedes mismos: Artículo 92. 1. Las decisiones políticas de especial trascendencia podrán ser sometidas a referéndum consultivo de todos los ciudadanos. 2. El referéndum será convocado por el Rey, mediante propuesta del Presidente del Gobierno, previamente autorizada por el Congreso de los Diputados. 3. Una ley orgánica regulará las condiciones y el procedimiento de las distintas modalidades de referéndum previstas en esta Constitución.    

Esta es la hoja de ruta hacia la definitiva separación de Cataluña (y del País Vasco) de España, aunque el camino deja otros episodios inenarrables. A saber:

España es ya un país confederal.- El documento describe la futura relación de España con Cataluña (y con el País Vasco, por el acuerdo con el PNV) como una relación bilateral entre dos entes soberanos, que solo mantienen unos livianos nexos comunes, como son los estados confederados. A destacar, que se pone en jaque el sistema de financiación común y es el entierro de ese Café para Todos que tanto molesta a los separatistas. Para empezar, con Junts y ERC se prevé condonar esos 15.000 millones de euros que la Generalitat debe al FLA (es decir, préstamos al Estado) y se abre la puerta a acabar con lo que llaman déficit fiscal de 22.000 millones al año. Todo ello debería ser asumido por el Estado, es decir, por el resto de autonomías que no tienen el privilegio de contar con conciertos económicos propios. Los inspectores fiscales del Estado ya alertan de que “la ruptura del principio de igualdad entre todos los españoles (…) y por la vía de hecho, generará comunidades autónomas de primera y comunidades de segunda”. Es así porque la cesión del 100 por 100 de los impuestos a Cataluña quebraría el actual sistema de financiación en el que hay regiones que aportan fondos netos y otras los reciben. Tal es así que el abrasado  ministro Escrivá decía hace meses que era anticonstitucional; otro que cambia de opinión.  Entre las regiones con fondo negativo está Cataluña con -2.168 millones, pero Madrid pone el triple, -6.313 y Baleares es la tercera con -334. La ruptura de este principio de solidaridad, hasta ahora defendido por el PSOE, dejaría a Castilla-La Mancha con 1.512 millones en el aire, por no hablar qué pasaría con la financiación autonómica si Madrid, que ahora pone esos 6.313 millones, decidiera hacerse nacionalista. «Se vislumbra de manera clara y evidente la ruptura del régimen constitucional actual en varias materias, entre las cuales se encuentra la financiera». Avisan los inspectores de Hacienda.

El documento de la Infamia es de una osadía inimaginable, pero solo voy a citar de pasada algunos aspectos más:

Miente sobre la historia. El PSOE asume el relato que hacen los separatistas sobre la historia de Cataluña, con citas a los Decretos de Nueva Planta y a la Guerra de Sucesión (1701-1713), como si el desencuentro naciera  de una derrota militar de Cataluña frente a Castilla. Pero más detalles se los dejo a mi compañero de blog, el historiador castellano Juan Pablo Mañueco. No voy a perder más tiempo con tonterías que lamentablemente se enseñan en la escuela catalana y se difunden por su sectaria televisión autonómica, la más deficitaria de España y la que más canales tiene.    

No hay renuncia a la unilateralidad. El documento no recoge que Junts renuncie a proclamar unilateralmente la independencia, como ya hizo en 2017 y por lo que el prófugo terminó valientemente en un maletero camino de Waterloo.

Verificadores internacionales.- Como si se tratara de dos ejércitos en pie de guerra o como si España fuera una república bananera, se recoge que unos verificadores internacionales velarán por el cumplimiento de los acuerdos, pues los separatistas no se fían de Pedro Sánchez. Y se lo dicen a la cara para mayor ridículo de España como nación.

“Conflicto histórico”.- El PSOE asume  el lenguaje de los separatistas,  que parte de la existencia de un “conflicto histórico” que hay que resolver. Y esta es la manera. Por cierto, dejando a un lado al PSC y a Salvador Illa, su presidente y ganador de las elecciones autonómicas, y que ha quedado relegado en le negociación por exigencia de Puigdemont.

Amnistía total.- Lo que se desprende del documento, y pendiente de saber cómo han dejado la Ley para ser presentada al Congreso, es que la amnistía será total. Solo con que el delito pueda ser justificado por los derechos nacionales de Cataluña pisoteados. No sabemos si por ello alcanzará a los casos de corrupción que tiene Junts (su presidenta Laura Borrás está procesada por trocear contratos, el abogado de Puigdemont, Boyé, imputado  en un sumario de narcotráfico con Sito Miñanco de por medio y el juicio por corrupción a la familia Pujol está a punto de abrirse), pero si empiezan a liberar a  terroristas e incendiarios con el argumento de que no hacían nada ilegal, supongo que los presos de ETA pedirán su aplicación, porque con ellos también hubo lawfare.

En resumen, que Puigdemont ha logrado todas sus propuestas que llevó a la negociación con el PSOE, como pueden comprobar comparando el documento con su intervención del 5 de septiembre, aunque según su portavoz Patxi López “estaban en sus antípodas”. A cambio solo han dado una cosa, pero era lo único que le importaba a Pedro Sánchez. Sus siete votos para que no tenga que evacuar la Moncloa y dejar sitio a la alternativa, que por ahora ha conseguido taponar. Dijo el viejo Ramón Rubial, presidente del PSOE, en la primera Ejecutiva tras la victoria de Felipe González en 1982: “Solo te pido una cosa, que no te conviertas en objeto de división entre los españoles”. Y lo decía un viejo sabio que había estado media vida en la cárcel de la dictadura. Sobran las palabras ante el que ha hecho de la división y de alimentar a los extremos su estrategia de supervivencia y que ha culminado con este despropósito  del que no sabemos cómo vamos a salir. Porque una cosa es ser investido y otra diferente gobernar España con una coalición mal llamada progresista, y en la que se integra a la extrema izquierda española, catalana, vasca y gallega, y a la derecha carlista vasca y catalana, que solo quieren romper España. Como se preguntó ayer Felipe González: “¿De verdad merece la pena?”.

Quiebra de la caja común en seguridad social.- El otro documento de investidura, el firmado por Sánchez y el PNV, acepta algo que hasta ahora era inasumible para todos los gobiernos de la democracia: la gestión de la Seguridad Social. ¿Y para qué quiere el PNV gestionar la seguridad social cuando el balance del País Vasco es negativo, es decir, recibe más del Estado de lo que aportan sus cotizaciones? Los mal pensados dicen que es un trámite para pedir luego la ruptura de la caja común de la seguridad social y que los analistas alertan podría poner en dificultades nuestro sistema de pensiones y protección social.  

Pues esto es lo que hay.

Page, una isla en el océano sanchista

El secretario general del PSOE y presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, al final no tuvo más remedio que hablar de la amnistía, aunque lo hizo de una manera tan poco precisa que no aclaró nada, salvo que ya está cocida. Nada extraño de una negociación secreta que se lleva a cabo desde prácticamente el día de las elecciones del 23J en “domicilios particulares” de Madrid, nos cuenta la prensa. El escenario para hablar del tabú fue el Comité Federal del PSOE. Los altos cuadros socialistas no supieron, por boca de Sánchez, una palabra sobre el preámbulo de la Ley, y por lo tanto los motivos por los que el Estado se declarará amnésico ante los delitos producidos en octubre de 2017, para desdoro de los tribunales que aplicaron una ley “injusta”; tampoco saben a qué delitos y a quién alcanzarán (se habla de que llegará hasta a los CDR que incendiaron Barcelona); pero sí conocieron que “hay que hacer de la necesidad virtud”, y que “es la única vía de que haya un Gobierno progresista”. Aplausos con la sala puesta en pie, menos Page, pues es lo que querían oír los altos cuadros socialistas, no en vano muchos de ellos trabajarán para ese nuevo “gobierno progresista” que nacerá de esta amnistía, como le han exigido a Sánchez sus socios separatistas. Un Gobierno que, para mayor gloria de Sánchez, se constituye “en el nombre de España”, zanjó. Es una lástima que los que tienen que votar a ese gobierno no lo vean así, porque apenas unas horas después Oriol Junqueras(ERC) dejaba claro que esto de la amnistía es el primer paso, pero que ahora hay que proseguir con el derecho de autodeterminación ( que sólo está en la Constitución para el pueblo español en su conjunto), y una fiscalidad a la carta para Cataluña, en una negociación bilateral con el ·Estado, lo que agrandará las diferencias con el resto de autonomías y la igualdad entre los territorios de España. Sánchez tampoco mencionó que a la  amnistía se llega sin cautelas previas, según los portavoces separatistas, con lo que de no prosperar la negociación con su gobierno, siempre podrían volver al camino de la Declaración Unilateral de Independencia (DUI) y ante la que Estado está más desarmado que en 2017 al haberse derogado el delito de sedición. ¡Habría que conformarse con ponerles una multa a los insurrectos por exceso de velocidad o por vulnerar alguna ordenanza de limpieza, si regresan a las barricadas!

Sánchez reiteró que este partido es de los militantes, pero lo cierto es que lo que les ofrece no es más que un plebiscito sobre su persona, pues en la pregunta que se somete a consulta no se entra en la letra pequeña del acuerdo de investidura y se limita a preguntar:”¿Apoyas el acuerdo para formar un Gobierno con Sumar y lograr el apoyo de otras formaciones políticas para alcanzar la mayoría necesaria?”. Sobre cuáles son los puntos esenciales (y las líneas rojas) para lograr tal acuerdo, ni una palabra. Eso solo le compete a Sánchez, nuestro providencial presidente. Él sabrá.

Magdalena Valerio, Pedro Sánchez, Emiliano García-Page y Milagros Tolón, en Toledo, en 2015./Archivo GUDiario.

Page habría preferido incluir la amnistía en la pregunta del Comité Federal del PSOE, pero no es así ya que la amnistía es una condición sine qua non de los separatistas para hablar de lo demás; apenas el aperitivo. A la salida de la reunión del Comité, el líder del PSOE castellano-manchego no desveló cuál será su voto en la consulta, aunque sí descartó por completo que no haría ninguna operación para romper la disciplina de voto de los diputados socialistas elegidos en Castilla-La Mancha, porque “no puede haber 17 psoes”.  A Page se le pudo exigir que fuera a la reunión del Comité Federal, y no justificar su ausencia porque tenía que presidir una asamblea de regiones vitivinícolas en Francia; porque no habría sido de recibo que las críticas que hace en la prensa no las traslade al órgano más representativo de su partido. Y sobre todo porque con este discurso crítico, Page renovó en Castilla-La Mancha su mayoría absoluta y se debe a sus electores. Pero resulta infantil pedirles a los diputados socialistas de Castilla-La Mancha que rompan la disciplina de voto, porque esos diputados no responden ante él sino ante le ejecutiva federal de su partido, y por lo tanto ante Sánchez, que promovió sus nombramientos. Page no debe instar al transfuguismo de nadie; aunque sí puede marcharse a su casa si la deriva que se inicia con la amnistía termina en la ruptura de la España democrática y solidaria que alumbró la Constitución de 1978. Pero Page no está obligado a anticiparse, aunque más de uno en la actual dirección estaría encantado con que dejara el campo libre a las Tolones de turno. No es casual que la reunión del Comité Federal comenzara con una égloga de Sánchez hacia su presidenta, la ex alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón,  perdedora de las elecciones el 23J, o que la réplica a las críticas de Page en el Comité no fueran del secretario general, que no se rebajó a esa tarea, sino de otros dos perdedores como el ex alcalde de Valladolid, Óscar Puente, o de Valentín González Formoso, que preside un PSOE que solo ha gobernado en Galicia una vez en la historia; y con el respaldo de los independentistas del BNG. Quedarse en minoría y ser el único que no se levantó a aplaudir al Gran Timonel cuando justificó la amnistía, no le obliga a Page a marcharse de un partido en el que lleva militando toda su vida, como Felipe González o Alfonso Guerra, otros críticos a los que Sánchez no escucha. Pero sí debe continuar vigilante y denunciar a los que quieran arrojar a la Constitución a la basura. Porque la amnistía, como lo que viene después, ha roto el consenso político que cristalizó en la Constitución de 1978 y la idea de la reconciliación entre las dos Españas que presidió la Transición; y al futuro presidente del Gobierno no le va a quedar más remedio que ser sostenido por los que quieren romperla y no lo ocultan. Aunque a él, con tal de lograr la investidura, le da un poco igual. Ya cambiará de opinión cuantas veces haga falta.

Esto es lo que hay.   

P.D.- El proceso de deconstrucción de España (balcanización, dijo Feijóo) que se acelerará tras la investidura de Sánchez, por exigencia de sus socios, dará lugar a momentos de gloria para los medios. Entre ellos estará la imagen de un secretario de Organización del PSOE (el número 3 del partido) llamando «President» a un prófugo de la Justicia española y bajo una enorme fotografía del referéndum ilegal del 1-0. ¿Qué vendrá después?       

Una llamada al acuerdo aunque no esté de moda

Se acaba de presentar el proyecto de presupuestos del gobierno de Castilla-La Mancha para 2024 y que contemplan una inversión de casi 110 millones en la provincia. Entre lo positivo, destacan las inversiones en el nuevo Hospital, dinero para continuar las obras del campus, para la nueva Residencia de los Olmos o el arreglo de la Hospedería de Pastrana. También se contempla una inversión de 3,8 millones procedente de Fondos Europeos para la Ciudad del Cine de Guadalajara, que se ubicaría en el Fuerte de San Francisco y que el gobierno de Page considera esencial. Estoy de acuerdo con ello, porque es una idea bien valorada por la industria cinematográfica,  que aprecia tener unos estudios estables a media hora de Madrid, con lo que ello significa facilitar y abaratar rodajes de series y películas. El Fuerte ya ha sido plató para varias de ellas y si los productores salieron contentos, como parece, es un terreno que tenemos recorrido. Desconozco cuál será el vehículo para la gestión de esa Ciudad del Cine de Guadalajara, aunque supongo que deberá acordarse entre los promotores del proyecto, entre los que evidentemente Junta de Comunidades y Ayuntamiento de Guadalajara deberían ir de la mano. Cometería un error la alcaldesa Ana Guarinos si se distanciara de este proyecto, por ser una iniciativa que viene del mandato anterior, sencillamente porque a Guadalajara y a su economía le conviene tener esa Ciudad del Cine. Tampoco caben los retrasos porque los Fondos Europeos exigen que el 31 de diciembre de 2024 esté ejecutado el 50% de esos 3,8 millones de euros, para poder llegar al 100 por 100.

Page presentando el proyecto de nueva estación de autobuses en febrero de este año.

De la misma manera, el gobierno de Page se equivocaría si se olvidase de otro proyecto muy necesario, como es la nueva estación de autobuses y que no figura en los Presupuestos de 2024. Y podría razonar lo mismo a sensu contrario: la ciudad de Guadalajara necesita esa estación, porque data de la primera legislatura de José Bono, el edificio está hecho una ruina y Guadalajara tiene el doble de población y el triple de servicios a prestar que entonces. Hay que subrayar que en los Presupuestos regionales de 2023 ya se destinó una partida de 500.000 euros pero en el de 2024 ni siquiera aparece. El delegado de la Junta, José Luis Escudero, lo atribuye a que en Guadalajara se ha producido un cambio de gobierno y que les parecería “razonable y respetuoso” escuchar a los actuales regidores para “ver qué planteamiento tienen”. Parece lógico escuchar al nuevo equipo de Gobierno, pero me desagrada que se pueda perder un año en consultas y  a la espera de la reunión entre Page y Guarinos que, parece ser, tendrá lugar este noviembre y en la que se daría un repaso a los numerosos temas pendientes que tienen las dos instituciones. Es de esperar que ambos políticos sepan estar por encima de partidismos baratos y recordar que el arreglo del edificio fue presentado por el propio Page, con una inversión de 1,8 millones y un plazo de ejecución de 8 meses. De él podemos leer: «Las obras incluirán mejorar la envolvente térmica de la fachada, instalar dos escaleras mecánicas para llegar a las dársenas, arreglar los tejados y solventar los problemas estructurales que tiene el edificio. Además se reordenarán los espacios interiores y se rediseñará la entrada principal para aumentar su visibilidad aunque dicha entrada permanecerá en el mismo lugar que ahora». Como bien señaló Page, el actual aspecto de la estación sería más “grotesto” con el cambio que va a experimentar la zona en donde se está construyendo ese nuevo campus; y yo no puedo estar mas de acuerdo. No se deben dar pasos atrás, sino adelante, pues el desarrollo de esa estación no se puede llevar a cabo al margen de la iniciativa privada, para que no suceda como en los locales sin uso que afean a la estación actual.

Tampoco figura en los Presupuestos de la Junta esa nueva Biblioteca Municipal que se había proyectado en el Fuerte. Tan decidido estaba con Rojo de alcalde que se presentó a la prensa como cosa hecha, aunque ahora se quiere llevar a otro lado. La idea de la Junta es reservar todo el espacio para la ciudad del cine, dada la envergadura del proyecto, y a mí no me parece mal, siempre y cuando haya un compromiso serio para consolidar las antiguas naves del Fuerte, dentro de ese proyecto de Ciudad del Cine; y un acuerdo sobre la nueva biblioteca en ese mismo barrio. El delegado de la Junta, “espera, sinceramente», que haya «responsabilidad» y todos sumen en la misma dirección y que se aprovechen esos fondos europeos». «Es una gran oportunidad para dar un uso a estas instalaciones”, matiza, y yo estoy de acuerdo con él.  Por eso sería tan importante que las relaciones institucionales entre Ayuntamiento y Junta no se echen a perder, por la nueva composición del gobierno municipal, ya que así lo han decidido los ciudadanos, porque Guadalajara es la segunda población de la región, y se merece estar por encima de banderías partidistas y cálculos electorales.

Esto es lo que hay; y lo que el vecindario espera. Una llamada al acuerdo en la legislatura, aunque no esté de moda.    

Los propietarios, paganos del ajuste

El segundo teniente alcalde y concejal de Hacienda de Guadalajara, Alfonso Esteban, anunció una muy importante subida del Impuesto de Bienes Inmuebles (vulgo, la contribución) para el año 2024, que se traducirá en incrementar el coeficiente que se aplicaba hasta ahora del 0,46 al 0,54. Según sus cálculos, si por una vivienda se estaba pagando 600 euros de IBI al año, ahora, se pasará a pagar 700 euros. La justificación que dio es que se han encontrado con un “agujero de nueve millones de euros”, por unos ingresos mal calculados en el presupuesto aprobado por la anterior corporación de PSOE +Cs. Se presupuestaron 10 millones de ingresos por instalación de placas fotovoltaicas y 2 millones de euros por el canon de esas placas. A día de hoy, el canon ha sido cero y el ingreso de 3 millones de euros, por lo que hay un descuadre de 9 millones, dijo Esteban.  [Fue sonado el caso Tomey, que por un mal cálculo de ingresos sobre el canon energético en la Diputación fue imputado por la Fiscalía de Guadalajara y frenó su carrera política, aunque finalmente su caso fue archivado por la Audiencia Nacional]. Ante esta acusación, ha replicado el anterior alcalde, Alberto Rojo, todavía concejal en el Ayuntamiento, cargo que compatibiliza con el de diputado al Congreso, negando no la mayor, aunque matizando: no hay un solo informe técnico en el Ayuntamiento que hable de “ruina heredada” y todo lo demás es “mentir”. Hay que aclarar que ningún organismo público puede declararse en “ruina” o en “quiebra”, como la empresa privada, así que esa palabra no la van a encontrar en ningún documento oficial, pero sí puede ocurrir que un agujero presupuestario afecte a la liquidez de la institución, y ello desencadene un retraso en los pagos a los proveedores, como sucedió con muchas instituciones en la gran crisis del 2008, y que llevó a la ruina a muchas pequeñas empresas por impagos con la administración. Ese es el riesgo que se intenta evitar con esta subida del IBI, admitió el concejal de Hacienda, pero esto no quita para que se cargue el coste del deseable ajuste en los bolsillos de los propietarios de viviendas de Guadalajara. ¿Qué culpa tienen ellos?

El concejal de Hacienda, Alfonso Esteban.

Aunque el concejal de Economía debería aportar más detalles y documentación oficial sobre las dimensiones del agujero, vamos a dar temporalmente por bueno (hasta la liquidación final del presupuesto) que el desajuste existe, que se presupuestó mal [la alcaldesa Ana Guarinos llegó a hablar de pufo, que según la RAE es una deuda cuyo pago se elude de forma fraudulenta; estafa, engaño, petardo] por lo que acepto que hay que tomar alguna medida extraordinaria y evitar que el Ayuntamiento vuelva a tener problemas de liquidez, aunque para ello tiene varias soluciones. A saber.

La medida más responsable sería ajustar el capítulo de gastos a la cuantía del agujero, mediante la reducción de subvenciones o inversiones que no sean de emergencia social, incluyendo el gasto corriente, y por qué no, dando ejemplo con la rebaja de sueldos a la corporación, grupos municipales, asesores, etc. También podría aprobar nuevos arbitrios municipales, que podrían ser temporales hasta que se resuelva el agujero; o subir algunos de los existentes.

No se ha hecho y se ha buscado lo más fácil: cargar el ajuste sobre los propietarios de las viviendas en Guadalajara, que al final serán los que paguen, con esa subida del coeficiente, esos 9 millones que presuntamente se presupuestaron mal. Desde luego que es lo más seguro, porque no hay más que darle a la calculadora, hasta que salgan los números, ya que sabes que el IBI es el impuesto más fiable entre los que recauda el Ayuntamiento. El contribuyente lo paga. Pero una cosa es que sea el camino más fácil y otra que sea el más justo. Es la medida más iliberal que podía tomar esta corporación municipal, formada por partidos como PP y Vox que, eso dicen, están por una fiscalidad moderada y por dejar el dinero en el bolsillo del contribuyente. ¡Pues ya se ve! Esto es lo que hay.

Perfil bajo

Pasó desapercibida la efemérides de los primeros cien días del nuevo gobierno municipal, esa cifra que en la cultura democrática se concede de gracia a la crítica frontal de la oposición, porque se considera que es el tiempo mínimo para que un nuevo equipo pueda acomodarse. También suele utilizarse para hacer un primer balance sobre el legado recibido, y para detallar los principales proyectos de una acción de gobierno a desarrollar a lo largo del mandato. El actual gobierno de coalición en Guadalajara eligió un perfil bajo en su comparecencia, y supongo que no será solo por la carencia de un jefe de comunicación que explique y dé brillo a la cuestión, cargo que no se ocupó hasta el pasado jueves, como siguen sin renovarse otros altos cargos municipales, por lo que supongo que la alcaldesa Ana Guarinos se toma su tiempo y no le importa mantener un perfil bajo en este primer tramo de mandato, aunque sea a costa de que el grupo socialista, que todavía sigue rumiando su derrota y no termina de aceptar que ha pasado a la oposición, le dé pie a decir que la alcaldesa no tiene proyecto.  Es una decisión respetable, pero hay cosas que merecen mejores explicaciones, como sucede con la situación económica del Ayuntamiento. La alcaldesa llegó a hablar de un “pufo” de 9 millones de euros, porque según parece el  anterior equipo de Gobierno  había contado con unos ingresos que finalmente no se han producido. La explicación del concejal de Hacienda es que se presupuestaron 10 millones de ingresos en el ICIO por instalación de placas fotovoltaicas y 2 millones de euros por el canon de esas placas, y a día de hoy el canon ha sido cero y el ingreso solo de 3 millones, es decir, 9 millones menos. Habrá que esperar a la liquidación final del ejercicio para saber cuál es el estado de las cuentas municipales, pero de momento me ha dejado preocupado que el concejal de Hacienda, Alfonso Esteban, no haya descartado una subida de tasas e impuestos en los presupuestos de 2024. Se supone que la escalada fiscal es cosa de la izquierda, porque está en su ADN, así que si la derecha ya viene con excusas para agujerear también los bolsillos al contribuyente, que soporta una inflación de perros, tendrá que explicar muy al detalle el estado de la economía municipal, incluso con una auditoría, si la situación fuera tan grave como deslizan y los anteriores gestores desmienten. Y paralelamente a esa subida fiscal tendrían que explicarnos qué economías y ajustes se han realizado por este equipo de gobierno de PP-Vox como para que se resigne una idea tan esencial, como es la contención de la fiscalidad, en cualquier gestión de corte liberal. Ya se sabe: si sacas dinero del mercado estás lastrando el crecimiento.  

esteban guarinos 2023
El concejal de Hacienda mira a la alcaldesa Guarinos durante la rueda de prensa con motivo de los primeros cien días de gobierno.

Por estas y otras cosas que pudieran traernos la legislatura, habría sido muy deseable que con motivo de estos cien días se hubiera desplegado una hoja  de ruta más concreta sobre cuáles son las prioridades y la posición de este equipo de Gobierno; y las medidas a adoptar en los temas más candentes: plan de urbanismo, fiscalidad, casco histórico, solares sin edificar, Fuerte San Francisco, mercado de abastos, autobuses,  gestión  deportiva e instalaciones municipales, cultura, ferias y ocio, política de ayudas y subvenciones, familia, violencia machista, migraciones, empleo, empresa y emprendedores, eficiencia energética, reducción del gasto supérfluo; y aquí paro para no cansar.  

¿EDUCACIÓN SEXUAL?- España, uno de los desiertos demográficos de Europa [con un 6,9% de tasa de natalidad y un número medio de hijos por mujer del 1,19%], tuvo el año pasado 98.136 abortos, un 9% más, según los datos del Registro Estatal de Interrupciones Voluntarias de Embarazo. De ellos, en Guadalajara fueron 495 las mujeres que decidieron abortar libremente, haciéndolo en centros privados (concertados o no) fuera de la provincia y la región, que no dispone de este servicio. Llama la atención que 252 de estas mujeres (el 50,9 por ciento) no usaban ningún método anticonceptivo, por lo que el aborto fue para ellas el anticonceptivo que no se plantearon utilizar en su relación. Es para reflexionar que con tanto tiempo en que la educación sexual está en los programas de los colegios, y se supone que también debería formar parte de la educación que se recibe en la familia, haya un número tan alto de abortos, que se podrían haber evitado, y con ello la carga, principalmente psicológica, asociada a cualquier interrupción del embarazo; y especialmente entre los jóvenes: 162 de las mujeres que abortaron en Guadalajara tienen menos de 24 años, el 32,7%.  

UNA GUERRA GLOBAL.-La agresión de los terroristas de Hamas contra el estado de Israel ya ha producido 700 víctimas mortales y 2.200 heridos cuando escribo este post, amén de más de 400 palestinos muertos por la represalia del gobierno de Bibi  Netanyahu, muchos de ellos por los bombardeos sobre la franja de Gaza, territorio utilizado por los fanáticos islamistas para lanzar sus cohetes y alimentar así la acción-represión de la que sacan partido. Este no es un episodio más del conflicto árabe-israelí desde que se fundó Israel en 1948. Los fallos en la inteligencia militar judía y el número de muertos en la población civil ha dejado tocado seriamente a Netanyahu, que está peligrosamente contra las cuerdas y vamos a ver cómo gestiona el secuestro de más de medio centenar de sus compatriotas, entre ellos mujeres, ancianos y niños, que pueden ser utilizados como escudos humanos frente al contrataque del ejército, que llamó a filas a los reservistas. Si a esto unimos la situación tan delicada que vive el mundo desde la guerra de Ucrania, y los apoyos políticos de cada contendiente (los aliados de Israel son Estados Unidos y la Unión Europea; y a Hamás le da soporte Siria e Irán, y detrás de Irán está Putin) nos encontramos con otra guerra global en la que la geopolítica va a influir peligrosamente. Hasta el punto de que ni el propio gobierno español tiene la misma posición, aunque su presidente y el grupo mayoritario socialista sí parecen saber esta vez en qué campo juega España. Solo que si a este panorama internacional, que lastrará los mercados y la economía, le sumamos la situación interna española, donde para investir a un gobierno hay que pagar un alto precio a los separatistas, no puede causar más que desasosiego. Esto es lo que hay: ¡Con lo que nos viene encima, estamos como para poner en solfa la Constitución y el Estado de Derecho, en lugar de llegar a acuerdos de Estado entre PSOE y PP, como correspondería a un presidente sensato, que no quiera ver comprometida su legislatura por unos socios impresentables ante sus aliados europeos!

El discurso del Rey

Hoy, hace justamente seis años, el rey Felipe VI, como hizo su padre Juan Carlos I el 23-F, salió en defensa y amparo de la España constitucional con un discurso rotundo en un momento dubitativo del gobierno y oposición. El Rey puso las cosas en su sitio desde el primer párrafo: “«Desde hace ya tiempo, determinadas autoridades de Cataluña, de una manera reiterada, consciente y deliberada, han venido incumpliendo la Constitución y su Estatuto de Autonomía, que es la Ley que reconoce, protege y ampara sus instituciones históricas y su autogobierno».

Hoy, seis años después, el Rey ha recibido en Zarzuela a Pedro Sánchez, que se ha presentado ante el monarca con la idea de formar gobierno, ¡gran paradoja!, apoyado en quienes actuaron contra la Constitución y ese Estatuto de Autonomía. Que ni tan siquiera se han dignado a acudir a Zarzuela a informar al Rey sobre cuáles son sus propósitos ante la investidura del actual líder del PSOE. Pero su apoyo no va a ser gratis. Tal y como han repetido tantas veces,  para ello exigen la aprobación de una Ley, parece que anticonstitucional, como es la Amnistía [la Constitución prohíbe el indulto general, una figura legal menor, como Renfe no autoriza montar en los trenes con perros, y nadie cuestiona si podría llevar un oso] y otra medida que no ofrece dudas: el derecho de las comunidades autónomas a su autodeterminación. La amnistía supondría, entre otras cosas, reconocer que las leyes por las cuales fueron juzgados los separatistas son injustas y fruto de un régimen no democrático; aplicadas por tribunales políticos dependientes del Ejecutivo; y ejecutadas por fuerzas policiales fascistas que reprimen la expresión de los ciudadanos que fueron a votar ese 1-0 de 2017. La amnistía que exige el separatismo constituiría el triunfo de aquellos a los que se refería el rey en la siguiente frase. “«Ante esta situación de extrema gravedad, que requiere el firme compromiso de todos con los intereses generales, es responsabilidad de los legítimos poderes del Estado asegurar el orden constitucional y el normal funcionamiento de las instituciones, la vigencia del Estado de Derecho y el autogobierno de Cataluña, basado en la Constitución y en su Estatuto de Autonomía».  

Conseguida la amnistía, como exigencia previa, los separatistas nos advierten que luego vendría el referéndum para la independencia de Cataluña, que choca directamente con la Constitución, que solo reconoce la soberanía del pueblo español, no el de sus regiones. Aquí, Sánchez y Conde Pumpido lo va a tener más difícil y aunque aparentemente no están dispuestos a esta cesión, a buen seguro que buscarán un atajo pactado para que algún día se celebre ese referéndum. Yo intuyo que la vía transitoria elegida sería el modelo confederal para España, en el que Cataluña y País Vasco serían naciones soberanas libremente asociadas al Estado Español, con lo que sí dispondrían de soberanía para abandonarlo, un modelo similar al que Ibarreche trajo al parlamento español en 2005 y que éste lo devolvió  a Vitoria a vuelta de correo; por anticonstitucional. Un modelo confederal satisfaría la tercera exigencia de Puigdemont y compañía, la independencia fiscal, lo que colocaría en situación de privilegio a Cataluña frente al resto de autonomías, menos las dos forales, porque deberían valerse por si mismas al decaer el principio de solidaridad, lo que desataría una insurrección en el resto de España; también en la Castilla-La Mancha de Page. No olvidemos que por ello los separatistas reclaman cerca de medio billón de euros en pago de una supuesta deuda histórica, única manera de que la República Catalana no naciera como un estado fallido al que nadie le prestaría un euro. Ni Rusia, ni China. Ante estas demandas, el rey Felipe VI dijo en su discurso: «reiterarles que desde hace décadas vivimos en un Estado democrático que ofrece las vías constitucionales para que cualquier persona pueda defender sus ideas dentro del respeto a la Ley. Porque, como todos sabemos, sin ese respeto no hay convivencia democrática posible en paz y libertad, ni en Cataluña, ni en el resto de España, ni en ningún lugar del mundo. En la España constitucional y democrática, saben bien que tienen un espacio de concordia y de encuentro con todos sus conciudadanos».

El Rey recibe a Pedro Sánchez en su ronda de consultas para la investidura./Casa Real.

A buen seguro que el rey Felipe VI habrá recordado todo esto cuando la solución que le haya ofrecido Sánchez sea una investidura respaldada por un prófugo y unos partidos separatistas que quieren aprovecharse de la situación para llegar más lejos de lo que se llegó en Cataluña el 1-0 o lo que consiguió ETA del Estado en su carrera criminal. Ante ello podría repetir el rey que «son momentos difíciles, pero los superaremos. Son momentos muy complejos, pero saldremos adelante. Porque creemos en nuestro país y nos sentimos orgullosos de lo que somos. Porque nuestros principios democráticos son fuertes, son sólidos». Pero no lo hará, porque él sabe cuáles son las competencias que le otorga esa Constitución que los potenciales aliados de Sánchez quieren derribar. Acabará proponiendo al candidato socialista para la investidura, aunque muchos nos lamentemos que en esta situación no tengamos a un Jefe del Estado con poderes constitucionales suficientes como para poder explorar el gobierno de un candidato independiente, pero respaldado por las fuerzas mayoritarias del parlamento. Un gobierno que no esté secuestrado por una minoría de irredentos separatistas y sobre el que pretende cabalgar un político narcisista que se cree Napoleón y con derecho, para mantenerse en el poder, a promover una nueva Transición, porque este régimen de 1978 a él  no le vale.

Pues Urkullo se lo ha dejado claro: para esa legislatura “le harán falta los votos de todos nosotros y todos los días”.  Esto es lo que hay. O como escribe el maestro Raúl del Pozo:»…ni el mismo Pedro Sánchez sabe a dónde nos puede llevar. Nos está metiendo en un despropósito después de declarar el estado de confrontación permanente con los consensos básicos y su intento de reescribir la Constitución».

Una propuesta sostenible para las Ferias

Vamos primero con la actualidad. Las Ferias han salido bien, como casi siempre, porque Guadalajara ha estado en la calle de forma masiva, sin que debamos lamentar incidentes de relevancia. En las noches del fin de semana fue una multitud la que ocupaba el perímetro que va desde Santo Domingo a la Fuente de la Niña, lo que se traduce en un buen negocio para hostelería, feriantes y puestos de comida. Al mediodía, La Concordia estuvo también muy animada, y en la que el Vermú de Nipace fue el rey indiscutible de la fiesta; se nota que saben de esto.

Si entramos más al detalle:

Los encierros volvieron a ser el espectáculo más multitudinario de las Ferias. En el fin de semana se llenó la plaza, y hubo que restringir el acceso antes de que llegara el encierro, que resultó bastante bien al correrse los toros que se lidiaron por la tarde, como solo se hace en Pamplona. Hay muchos corredores, pero no tantos como para que los más preparados cojan toro con facilidad y terminen su carrera, lo que solo unos pocos logran en la capital navarra.

El encierro sigue siendo el espectáculo que más gente concita en la semana grande./GUDIARIO

La corridas contentaron mayoritariamente al público festivo que acude a la plaza de Guadalajara, como lo prueba que en los tres días se abrió la puerta grande y en dos de ellas, para la toda la terna actuante. ¿Milagro? Solo la infinita generosidad del público, que no del aficionado, minoritario en esta plaza. El presidente intentó poner algo de cordura el primer día al negar el rabo a Roca Rey, por matar mal, pero se montó tal protesta que se ablandó en los últimos días hasta el punto de dar a El Fandi dos orejas en una de las faenas más horrendas que se le ha visto en la plaza de Guadalajara. Hubo petición, pero la segunda oreja es del presidente; aunque el espectador festivo no lo sepa. ¿Pero merece la pena aguantar impertérrito el chaparrón cuando estás allí por la barba? Lo peor: los toros anovillados del segundo día, excepto uno, impresentables para una plaza de segunda. El incidente más desagradable, el salto al ruedo de dos antitaurinos habituales, que puso en solfa las medidas de seguridad. Se corrigió los días siguientes, con más policía en la plaza, y no solo la local, pero no se puede pretender que ante protestas de este tipo sean los banderilleros, monosabios y areneros los que hagan de fuerzas de seguridad, porque no están preparados para ello y se podrían buscar un lío. Buenas entradas y que demuestran que la tauromaquia ha remontado la crisis.

Los conciertos: Tuvieron una gran respuesta de público, demostrando que no hace falta que todo sea gratis para que la Fuente de la Niña tenga buenas entradas. A la M.O.D.A., un buen grupo ayuno en geografía, asistieron 5.100 personas; a un desganado Loquillo, 7.500; y a la bailarina-cantante Lola Índigo el aforo completo, unas 8.500 personas, de ellas miles de niñas y adolescentes, cuyo ideal en la vida ya no es ser funcionarias, sino star-system como la granadina. La Fuente de la Niña podría acoger más público, pero habría que habilitar la zona de pelouse, como en las carreras, y modificar el plan de seguridad.  

No quiero entrar en más detalles, para que no alargar este post, y voy con la cuestión de fondo: el modelo. El actual se modificó en el anterior mandato, por lo que lo podríamos definir como modelo Simón, por su impulsora, y ha sido asumido casi en su integridad por la alcaldía de Guarinos, algo comprensible porque en lo esencial había funcionado y no era cuestión de ponerse a experimentar nada más llegar al cargo. Las modificaciones que se hicieron, como dejar expedito para la movilidad el paseo de Francisco Aritmendi, un acierto, o cobrar una pequeña cantidad por los conciertos.

Una de las carpas se plantó sobre las pistas de atletismo./GUDiario.

Mi propuesta es mantener sustancialmente este modelo a corto plazo, pero reconociendo que a medio y largo plazo es insostenible. No se pueden okupar los cuatro mejores parques de Guadalajara con las carpas de las peñas y los puestos de morcillas, porque el deterioro es evidente y luego cuesta meses -y dinero- en reparaciones. Les invito a que se den una vuelta, hoy.  Este año se ha rizado el rizo porque la carpa de una de las peñas más numerosas estaba plantada en las mismas pistas de atletismo. Menos mal que por lo menos no había ninguna en las pistas de tenis de San Roque, como hace un año. El campo de la Fuente de la Niña es muy del agrado del público, pero se impide su habitual uso deportivo durante largo tiempo y también sufre un deterioro en el montaje del escenario y en el césped. Resulta una paradoja que la parcela municipal que el Ayuntamiento cedió a Defensa, como pago por la propiedad de Las Cristinas, que a su vez cedió a la Universidad de Alcalá, sea ahora donde se ponen las grandes atracciones, porque el ministerio la tiene en venta y ya veremos por cuánto tiempo se la dejará al Ayuntamiento para su uso ferial. Pero es que, además, su suelo es muy precario hasta el extremo de que este año una media docena de pesados artilugios no se pudieron instalar en ese terreno, porque estaba muy suelto por las lluvias. Y en lo administrativo el ayuntamiento tiene el impedimento a cobrar la tasa  por uso de la vía pública, para felicidad de los feriantes, porque la propiedad es de Defensa. Pero sobre todo en tiempos en que miramos más estas cosas: un modelo que okupa parques, jardines, campos y pistas de atletismo y necesita de generadores de petróleo, porque carece de instalaciones fijas, no es sostenible.

Apenas dos atracciones se instalaron en esta parcela, porque con las lluvias el terreno no estaba compactado y podría haber sido peligroso. /GUDiario.

Caería en el populismo habitual de nuestra clase política si pidiera a la alcaldesa que lo cambiara de un año para otro. Por eso mi propuesta es que sigamos con el modelo Simón, pero sentando las bases de lo que deben ser unas Ferias modernas para una ciudad de cien mil habitantes, y que recibe otros tantos de la provincia y el Corredor del Henares. Hay que pensar también a largo plazo en la ciudad, como hizo Javier de Irízar con Aguas Vivas o don Pedro con el polígono de El Balconcillo, aunque decisiones de este tipo no tengan un rédito electoral  a corto plazo. Por ello me parece indispensable lograr un consenso entre los distintos grupos municipales, para que una inversión estructural como esta quede fuera del juego político más sectario. Incluso se podría hacer una consulta telemática final a los vecinos, cuando el proyecto esté más definido. Y avanzo: hay que buscar un suelo, lo más cercano posible al casco, donde se pueda dar cabida a todos los agentes de nuestras ferias: peñas, ferial, puestos de comidas…Y un auditorio que saque a los conciertos del campo de deportes de la Fuente de la Niña. No hace falta grandes lujos, vale con una esplanada compactada, como en la Huerta del Obispo, de Alcalá, que nos robó nuestro Gigante. Solo así se podría justificar alejar la Feria del casco urbano.   

En torno al Ferial Plaza hay terreno suficiente para una ampliación del recinto ferial que se ha dejado utilizar en las Ferias de 2022 y 2023, con lo que se podrían concentrar todas las actividades y promover un recinto para conciertos.

¿Y dónde está ese sitio? En los nuevos desarrollos desde Aguas Vivas a la Ronda Norte, no lo encuentro a simple vista,  así que entonces mi propuesta es integrar en ese futuro recinto ferial la esplanada ya construida junto al Ferial Plaza, y que se ha quedado sin uso en las Ferias de 2022 y 2023. Como no hay espacio suficiente en ella para acoger a todos los agentes que hoy conforman nuestras Ferias, empezando por las peñas, su alma y verdadero poder fáctico, sería imprescindible ampliar esos terrenos, que son rústicos, y no hay mejor momento que ahora que se va a redactar un nuevo Plan de Urbanismo. Ese nuevo Ferial para todo el siglo XXI sí sería sostenible, y con la ordenación del terreno adecuada, aseguraría los beneficios que tiene el modelo Simón, pero que se diseñó con la urgencia del corto plazo.

Esta gran parcela que acogió al nuevo recinto Ferial lleva los dos últimos años sin utilizarse, aunque está pavimentada. Mi propuesta es ampliar el ferial en torno a ella./GUDiario.

No me chupo el dedo, y ya sé que lo más fácil es dejarlo todo como está y el que venga atrás, que arree. Porque todo esto requiere mucho trabajo, inversiones en alianza con otras instituciones y seguramente la incomprensión de los que lo quieren todo para mañana. Pero si así hubieran pensado los dos alcaldes que cito, ni habríamos tenido polígonos para acoger a la expansión de la ciudad en los sesenta, ni luego suelo urbanizado para los nuevos desarrollos de los ochenta, y que posibilitaron la Guadalajara actual. Esto es lo que hay: hay que elegir entre pasar a la historia o limitarse a la gestión del día a día, sin complicarse la vida.

P.D.- En mi post anterior opiné sobre la oportunidad de fijar una fechas fijas en torno al veranillo de San Miguel, que en Guadalajara llueve menos que a mitad de septiembre, así que no insisto más.

De Ferias y algo más

Guadalajara tiene Ferias por un privilegio real en el reinado de Alfonso X de Castilla (Toledo, 23 de noviembre de 1221​-Sevilla, 4 de abril de 1284​); y desde entonces hasta ahora. Por eso nuestras fiestas son también Ferias, porque comenzaron como feria de ganado, y con los animalitos llegamos hasta el siglo XX cuando la ciudad traspasó (en el sentido literal de la palabra) su muralla medieval y comenzó su expansión, primero en torno a la actual calle de Toledo, entonces escoltada por fincas de labor y casas de labranza; en los años setenta hacia el sureste con el polígono del Balconcillo; y desde los años ochenta por el noroeste con lo que comenzó siendo una iniciativa municipal de compra de suelo en Aguas Vivas, y que terminó de expandirse hasta Taracena por el terreno que ha quedado dentro del perímetro de la Ronda Norte. Casi todo está ya urbanizado, lo que nos avisa de la lentitud con que el municipio se toma la elaboración de un nuevo Plan Municipal de Urbanismo.

El chupinazo de las Ferias de 2023/ GUDiario

La corporación de Guadalajara siempre tuvo una obsesión porque las Ferias estuvieran en el centro. Así, esas primeras ferias alfonsinas se celebraban en la plaza Mayor; de allí subieron las tómbolas hasta la plaza del Jardinillo; ya en el siglo XX se empezó a utilizar la plaza de Santo Domingo y cuando se quedó pequeña se amplió al parque de La Concordia; y con el primer ayuntamiento democrático terminaron los cachivaches en unos terrenos de las monjas Adoratrices, ahora convertidos en parque. Con cada cambio se produjo la inevitable protesta de las fuerzas vivas, porque al decir de ellas se estaba alejando la fiesta de la ciudad; y sería la ruina. En la etapa de José María Bris se produjo un cambio de modelo al iniciarse la ordenación, terminada con Antonio Román, de una explanada junto al nuevo centro comercial de El Corte Inglés, ahora rebajado a Outlet, al otro de la A-2, pero que desde 2023 se ha dejado de utilizar porque durante el gobierno de Alberto Rojo-Sara Simón accedió a la pretensión de las peñas, un poder fáctico en las Ferias, para que todo se volviera a concentrar en la ciudad. La sucesora en la Alcaldía, Ana Guarinos lo ha asumido porque era la decisión más fácil.

El modelo actual tiene la ventaja de que está todo más a mano, sí, como aquellas Ferias de la plaza Mayor, pero no es sostenible. Para que quepa todo hay que okupar los cuatro principales parques de la ciudad (La Concordia, San Roque, Ferial y Fuente de la Niña) que por ello sufren daños de los que tardan en recuperarse el resto del año. Pero la gente está contenta y ya sabemos lo que hacen los políticos cuando la gente es feliz; ponerse al frente de la manifestación. Puede que algún día -aunque no lo espero- llegue una docta corporación que se atreva a pensar en Guadalajara a largo plazo, se arriesgue a perder votos y encuentre otra alternativa, como sería ampliar los terrenos del Ferial de la A-2, para que allí quepa todo, incluso un recinto para conciertos y no tener que maltratar el tartán y el césped del estadio de la Fuente de la Niña, cada vez que llegan las Ferias.  Pero va a costar, porque hoy se vive del momento y por ello los políticos caen en el populismo de buscar soluciones sencillas a problemas  complejos. Así que la cosa no pinta bien.  

Empleados municipales reparando los jardines tras las Ferias./GUDiario.

El éxito de las Ferias de Guadalajara depende mucho del tiempo, que en 2022 fue espléndido y contribuyó a que lucieran las Ferias de Simón. Pero este año, la AEMET nos avisa de que hay lluvias en el horizonte y habrá que ver cómo influye en el programa. Las primeras Ferias de Guadalajara fueron de otoño, como se correspondía con una ciudad agrícola castellana, pero ya en el siglo XX empezaron a adelantarse en el calendario con el propósito de encontrar una meteorología más benigna. De tanto echarlas para atrás acabaron juntándose con las de la Patrona, que en Guadalajara siempre tuvieron una vida aparte. Y así comenzamos a escuchar y a leer cosas tan raras como las Ferias de la Antigua. A fecha de hoy, la ciudad sigue sin tener una fecha fija para las Ferias, con lo que en los últimos años se ha hecho costumbre un criterio un tanto peculiar: que la Semana Grande empiece el lunes siguiente a la Patrona, 8 de diciembre, para que su procesión y los principales cultos religiosos no se hagan coincidir con encierros y charangas. Pero sucede que a mediados de septiembre suele llover en Guadalajara.

Yo soy partidario de encontrar unas fechas fijas para las Ferias de Guadalajara, coincidiendo con el veranillo de San Miguel, que en Castilla siempre nos alumbra con el último sol del invierno; y no acostumbra a llover. También se evitaría la coincidencia con numerosas fiestas en nuestros pueblos y Guadalajara recuperaría esa condición que tuvieron sus fiestas de Otoño: ser el broche de oro de las fiestas de la provincia. Con ello no habría que esperar a ver cómo cae cada año la festividad de la Patrona y echar hacia delante o hacia atrás la Semana Grande. Y devolveríamos la festividad de la Antigua a lo que siempre fue: el día 8 de septiembre y los cultos de la novena. Sin más historias.   

Siempre he creído que Guadalajara tiene unas buenas fiestas, porque se viven en la calle, y eso no es fácil de encontrar en otras capitales españolas. Las peñas y los encierros les aportan personalidad y más cuando con mucho esfuerzo es la única capital de provincia, con Pamplona -a la que siempre hemos mirado-, donde se corren los toros de las corridas. Otra cosa es que la Feria taurina viva en la incertidumbre, aunque eso tiene mal arreglo porque, en septiembre, hay toreros que se caen de los carteles porque están recuperándose de cogidas o sufren de estrés (lo que en la jerga taurina se conoce por atorao, de tantas corridas) y han cortado la temporada, como ha pasado con Morante de la Puebla.

Por tanto, a los que no han huido de las Ferias con el Club Alcarreño de Montaña, mis mejores deseos de que pasen unas buenas fiestas. Todos echamos cosas de menos, pero es justo decir que el programa tiene actos para todos los públicos. Aunque sería un error pensar que ese modelo Simón, de meter todo en los parques, tiene más recorrido. Pero esto es lo que hay.     

P.D. El atrabiliario  Rubiales, por dar en un momento de euforia un beso robado a una jugadora de fútbol, ha dimido; felizmente. Y será procesado. La ministra que promovió la ley del Si es Sí, y que ha terminado beneficiando a los miembros de esa Manada de la que nos querían salvar, ahí sigue, de ministra en funciones de Sánchez; y sin pedir perdón por tanta soberbia e incompetencia. Y con ella la vicepresidenta del Gobierno, Yolanda Díaz, que votó en contra de la reforma que su propio gobierno tuvo que pactar con el PP para limitar los daños. Vamos a ver qué se inventan, ahora que Rubiales se ha desgastado, para distraer la atención sobre la amnistía que nos viene. Ya lo tenemos:  Que Aznar va a encabezar un golpe de Estado, según descubrió la ministra de Puertollano metida en labores de Inteligencia, y que Puigdemont es un político intachable, como lo fue Pujol y su honrada familia. “Cosas veredes amigo Sancho”.   

Diempures, catalán

Tengo un cariño especial por el castillo de Diempures (siglo XI), en el alto Sorbe, por varias razones. Es frágil y delicado; se trata del único castillo provincial construido con pizarra; y está asomado a un acantilado de un centenar de metros sobre el Sorbe en lo alto de un cerrillo sobre lo se cree que fue un castro celtibérico (está sin estudiar), por lo que su bravo entorno fue la mejor de sus defensas.

Castillo de Diempures, con el portón de entrada a punto de caerse./GUDiario.

He marchado hasta él varias veces, siempre me pareció muy delicado, pero la última fue hace unos días, a finales de agosto, y les confieso que me dejó preocupado. Las pizarras y piedras del portón de entrada están cogidas con alfileres y me temo que están en serio riesgo de venirse todo abajo en el crudo invierno que vendrá. El entorno de Diempures es tan bello como inhóspito, porque debe soportar el viento, la nieve, el hielo y temperaturas por encima de los 20 grados bajo cero en el crudo invierno serrano, todo ello favorecedor de desplazamientos en los muros y que podrían desencadenar su derrumbe. Antes de que suceda todo esto, que sucederá, es necesaria la aprobación por la administración competente (ya sea estatal, autonómica, provincial o local) de una actuación coordinada de emergencia para consolidar las actuales ruinas y que por lo menos su proceso de deterioro no siga imparable. Yo aquí les pongo esta foto para que vean que no exagero. Una marcha desde Cantalojas al castillo de Diempures sería un atractivo más para esta comarca, cada vez más volcada al turismo, y una alternativa o mejor un complemento para la visita obliga al hayedo de la Tejera Negra.

Desconozco casi todo sobre quién era Diempures, al parecer un señor de la guerra que murió en la batalla de Aljubarrota contra los portugueses, y es una lástima, porque si fuera catalán tendría más esperanzas de que alguna autoridad se acordara de su castillo, uno de los más curiosos de esta provincia castellana, y por lo tanto con muy poca capacidad de influencia. Así que lo mejor es reivindicar a Diempures como un señor feudal de origen catalán; y esperar.

P.D. Les invirto a leer esta atractiva publicación de GUDiario sobre el castillo, donde encontrarán más detalles y fotografías.

CON ESTOS BUEYES.- El juzgado de Solsona (Lérida) dejó en libertad con cargos a cuatro CDR detenidos por querer boicotear La Vuelta a su paso por Cataluña. Las criaturas tenían pensado arrojar tachuelas y aceite para dificultar el recorrido de los corredores, sin importarles el peligro que de ello se deriva. Oriol Junqueras, el presidente de ERC, enmarcó esta protesta en el ejercicio del derecho a la libertad de expresión y pidió su libertad; y supongo que si alguna responsabilidad legal pudieran tener, para eso está la ley de amnistía que viene; que eso va a ser mejor que la lejía. Después del portazo a Feijóo, con estos bueyes va a tener que arar Sánchez una legislatura. Esto es lo que hay.

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