Notas pesimistas sobre trasvases de agua y votos

Leo que el Partido Popular piensa organizar una cumbre nacional en Murcia y que por lo que dicen los papeles, estará centrada en reivindicar el trasvase Tajo-Segura y en hacer crítica de la política de la ministra Teresa Ribera, a la que se le acusa de anti-trasvases, aunque durante du mandato se ha mantenido en lo fundamental el Memorándum que regula estas derivaciones, si bien es cierto que con correcciones a la baja. A este respecto hay que decir que si el ministerio no hubiera sido previsor al respecto, los principales perjudicados serían los regantes del Segura, porque habría habido meses en que no se podría haber trasvasado una gota de agua al haber entrado la cabecera en nivel 4, tal y como establece la Ley.

Los pantanos están por debajo del 20%, pero en el levante todavía creen que se ha trasvasado poco y reivindicarán más madera.Foto:GUDiario.

Me preocupa que  a estas alturas de la película y cuando empezamos a sufrir las consecuencias del cambio climático, un partido de gobierno, como el PP, caiga en el error de centrar su política sobre el agua en una infraestructura que fue producto de otra época, una dictadura, y de otro mundo climatológico (el principal problema del trasvase es que no se cumplieron las previsiones sobre precipitaciones) y quererlo elevar a una reivindicación central,  solo por motivos electoralistas en el levante español. El PP nacional  no puede seguir haciendo de la reivindicación del trasvase el eje de su política sobre el agua y mentir con que Ribera ha realizado una gestión antitrasvases cuando el año hidráulico se cierra con la cabecera del Tajo por debajo del 20 %. El presidente del PP de Castilla-La Mancha, Francisco Núñez, se lo debería recordar a sus correligionarios de Valencia, Murcia y Andalucía, si quiere tener un mínimo de autonomía y credibilidad y ser algo más que el delegado del PP en Castilla-La Mancha; porque los pusilánimes no ganan elecciones. La cabecera del Tajo no puede enviar un agua que no tiene a otra cuenca hidrológica, en este caso la del Segura, pero tampoco pueden sustituir alegremente unos trasvases por otros.

Me estoy refiriendo a lo que llaman tubería manchega, por no querer denominarlo trasvase cuando en realidad lo es, ya que se trata de una derivación de agua desde la cabecera del Tajo -otra vez- hasta la llanura manchega y que empezará a funcionar a partir de febrero. Unos de los argumentos que la Junta ha dado para oponerse al trasvase al Segura es que se trata de cuencas hidrológicas diferentes y que el desarrollo de un territorio no puede depender de un recurso, en este caso el agua, que se extrae a más de trescientos kilómetros. Pues estamos en las mismas: el territorio que alimentará el trasvase a La Mancha no está en la cuenca del Tajo, sino en la del Guadiana, a otros trescientos kilómetros y la única diferencia (más allá de que serán menos hectómetros los que se vayan a trasvasar) es de carácter puramente nacionalista: está en la misma comunidad autónoma.

El asunto está claro: la cabecera del Tajo no debería haber aceptado una  nueva servidumbre sin haber resuelto la primera, el trasvase Tajo-Segura, y si lo hace es porque afecta a las dos provincias menos pobladas y con menos peso político de la comunidad autónoma: Guadalajara y Cuenca. Y el que tenga dudas que hable con uno de los grandes expertos en la materia, Rufino Sanz Peinado, ex director general de Administración Local, o lea sus artículos publicados por este digital. Aquí les dejo dos piezas reveladoras. Un artículo se titula Sánchez no ha superado la prueba del Kobayashi Maru y el otro La tubería a la llanura manchega

No es tampoco baladí la tercera derivación o trasvase que ha debido soportar la cuenca del Tajo. Me estoy refiriendo al de Las Tablas de Daimiel, que si bien tiene poca trascendencia en lo cuantitativo (solo 3 Hm3), es muy elocuente en lo cualitativo. Me explico: ese magnífico parque natural solo se salvará con sus propios recursos, ya que de nada sirve utilizar 3 Hm3 del agua del Tajo para encharcar 140 hectáreas cuando hay más de 2.000 que están secas en estos momentos. No es serio ni sostenible usar para riegos los acuíferos del parque y luego pedir que lo remedie la exhausta cabecera del Tajo. Una broma o como dice la Plataforma Río Tajo Vivo, “cerrar un trasvase para abrir otro, lo mismo da que da lo mismo”.

Pero esto es lo que hay. No pintamos ni copas.          

P.D.Se necesitan entre 25 y 60 toneladas de agua para producir una tonelada del hidrógeno verde que está llamado a sustituir al gas en el sistema eléctrico. Y a eso lo llaman transición ecológica.¿Para cuándo?

Cuando el Estado renuncia a sus deberes

El pasado jueves, más de una veintena de personas vestidas de negro, al parecer vinculados a una empresa de desocupación, tal y como relata en una excelente información GUDiario, establecieron un control de entrada en torno a unas viviendas ocupadas en el acceso a Guadalajara por Francisco Aritio y no dejaban pasar a quienes no tenían un contrato de alquiler. Algunos okupas decidieron marcharse, aunque se desconocen cuántos permanecen todavía allí. En la zona se vivieron momentos de tensión porque algunos jóvenes les hicieron frente con palos de madera y otros objetos, y aunque la policía nacional mandó efectivos en torno a las 13,45 se retiraron quince minutos más tarde cuando no se había cerrado el episodio.

Hombres de negro, al parecer vinculados con una empresa de desokupación, controlaban la entrada a los inmuebles okupados./GUDiario.

El viernes se vivió en Guadalajara una situación más propia de un país donde el  Estado de Derecho es muy frágil y que ante una situación irresoluble,  la sociedad decide actuar por su cuenta. Recordemos que en España la Guardia Civil se crea para asegurar el orden y el derecho a la propiedad en el medio rural, que hasta su fundación en 1844 se llevaba a cabo por el Somatén y patrullas de voluntarios poco fiables.

Cuando el Estado de Derecho renuncia a sus deberes, y pierde el monopolio del  ejercicio de la fuerza, pasan estas cosas.

Pero también hay que ponerse en la piel de la propiedad, aunque sea un banco, que en un momento en el que la situación del mercado en Guadalajara es favorable,  otra vez,  a la comercialización de estos inmuebles, se encuentra con que está atada de pies y manos porque tiene unos okupas  a los que no les puede echar por culpa de unas leyes indulgentes con esta actividad ilegal.  Por no hablar de los vecinos que legalmente viven en aquellos inmuebles y que denuncian una situación insostenible, porque hay basuras e incluso heces en las escaleras y descansillos, utilizan bombonas de butano a pesar de que los pisos no tienen rejillas de ventilación, proliferan los enganches ilegales y hasta se hacen barbacoas en las viviendas. Y si se quejan, los amenazan. Guadalajara, octubre de 2022. No es Venezuela.

Coincidiendo con estos hechos, el pleno del Ayuntamiento aprobó simbólicamente  una moción contra la ocupación de viviendas, con el apoyo del PP, Vox y Ciudadanos, que se desmarcó así de sus socios de gobierno. Estos alegaron que la moción llega tarde porque ya se está tramitando a nivel nacional, pero ya vemos que la legislatura está en su final y siguen sin aplicarse medidas efectivas más allá de las 48 horas desde que se okupa una propiedad. En la izquierda populista municipal no ven dónde está el problema porque según ellos, apenas se han producido casos en Guadalajara. ¿Cuántas okupaciones necesitarán para que sea un problema de verdad?   

 Cuando el Estado renuncia a sus deberes, vuelven los somatenes e incluso el periodista se puede encontrar con un individuo de negro que, sin ninguna autoridad, trata de impedir un derecho fundamental, como es el de la libre información; y todavía pretende que el periodista le entregue el teléfono para que no siga haciendo fotografías. Por supuesto que con GUDiario no lo logró, ¡pero lo que hay que aguantar!  Por dejar pudrirse un asunto, este de las okupaciones, que ponen en jaque al Estado de Derecho, a la sociedad que paga sus impuestos (y cada vez más) y en una situación insoportable al que las sufre.

Pistas de atletismo Fuente de la Niña

POLÍTICA DEL DERRIBO.-El portavoz de la derecha populista nos asombró días atrás al abogar por la construcción de un palacio de  Exposiciones, de Congresos y de Ferias (no aclaró quién lo pagaría y lo que nos costaría) y en consecuencia “construir unas pistas de atletismo nuevas”, lo que lógicamente llevaría consigo el derribo de las actuales instalaciones municipales de la Fuente de la Niña, en las que entrenan atletas olímpicos y campeonas del mundo. No recuerdo una propuesta tan fuerte desde que un concejal de la última corporación municipal de la dictadura, y que como ya ha muerto no le voy a citar, harto de que el Estado no reconstruyera el Palacio del Infantado, propuso derribar las ruinas que se habían salvado de las bombas incendiarias un 6 de diciembre de 1936 y hacer allí un colegio-residencia para chicas.

Esto es lo que hay. Ahora que se empiezan a elaborar los programas municipales sería de agradecer que los grupos políticos nos presenten nuevas propuestas para seguir construyendo ciudad, en lugar de tirar lo que han hecho corporaciones anteriores, y hacer la política de Penélope. Porque al fin y al cabo, una ciudad es la suma de lo que van promoviendo las sucesivas corporaciones ( y especialmente la sociedad civil en la economía y los planes de urbanismo), y en la que nos encontraremos de todo.    

Luces y sombras de unas buenas Ferias

Las Ferias de 2022 han sido de las mejores de la historia. Y en ello han influido decisivamente estas tres cosas: el buen tiempo (dejó de llover antes del largo fin de semana, que es el meollo de la fiesta), las inmensas ganas de divertirse de la gente (espoleada por los dos años de suspensión por la pandemia) y la decisión del actual equipo de Gobierno de trasladar a los parques de La Concordia, antiguo Ferial,  San Roque y Fuente de la Niña las actividades que reúnen a más público. A pesar de todo ello, haría mal el Ayuntamiento si de este éxito hace un discurso triunfalista, apegado a la propaganda, en lugar de ver cómo podemos mejorar unas Ferias que tienen luces, pero también algunas sombras.

Estas son las luces que yo he visto:

Más público en la calle: tener a las peñas y otras actividades concentradas en un área próxima en torno a los parques del suroeste de la ciudad han dado gran vida al casco, que se había perdido. Ha habido ruido y seguramente que hay afectados por la medida, no lo voy a discutir, pero no parece que se haya traspasado alguna línea roja insoportable.  

Las peñas: comportamiento ejemplar. En el chupinazo, con una plaza abarrotada, en los toros, en el día a día. Han madurado y son el alma de la fiesta. Hasta tal punto de que creo que han vuelto al centro para quedarse. ¡A ver quién las echa después de este año! Que todas ellas estén en carpas, y no en pisos o bajos como antes, ha disminuido las molestias.

Terrazas colocadas en la calle Francisco Airtmendi, en la noche del sábado/GUDiario.

-La hostelería: y especialmente los que tienen bares o restaurantes entre el Jardinillo y la Fuente de la Niña. No solo terrazas y mesas estaban abarrotadas tras la salida de los toros, este año se ha impuesto el tardeo con el vermú y se han servido chorizos y morcillas a las cinco y media de la tarde. El vermú de Nipace ha sido el epicentro, porque Rebollo y su gente saben de qué va este mundo de la hostelería.

La seguridad: parece que las fiestas se han desarrollado sin incidentes de gravedad, como pasó en Alcalá de Henares, aunque me gustaría ser más preciso de haberse facilitado diariamente el parte de incidencias de la Policía Local. Felicidades a la Policía Local, Policía Nacional y Protección Civil, como responsables.  

El público volvió masivamente a la plaza de Las Cruces en este primer año de Casa Matilla./GUDiario.

La Feria taurina: de las mejores que recuerdo y he visto todas menos una desde finales de los años setenta. Las figuras vinieron a la plaza de Guadalajara, quemando el mito de que si no lo hacían era porque se toreaban los toros del encierro. Jueves, viernes y sábado hubo grandes entradas (el viernes casi lleno) y los problemas surgidos en la del domingo vienen por un cambio de toros derivado de que la ganadería de Adolfo Martín, la recomendada por el Ayuntamiento, nos mandó una corrida que no llegaba a los pesos mínimos de una plaza de segunda categoría, no haciendo honor a esa confianza. Entre lo mejor, la actitud de la Presidencia de la corrida, empeñada en prestigiar a la plaza de Guadalajara y en la que las exigencias con los trofeos, no pueden ser las mismas que las de una plaza de pueblo de tercera categoría. Los aficionados de verdad, minoría en una plaza festiva, lo sabemos y se lo agradecemos, aunque nos consta que no es fácil no rendirse ante el  populismo, hoy en día.

-Los encierros: vistosos y muy organizados, hasta el punto de que han ganado prestigio en toda España y te puedes encontrar con un corredor de la mismísima Pamplona. Fue una lástima el caos del domingo, del que me ocuparé más adelante. Echo de menos un portavoz que, como en Pamplona, informe tras su finalización de los atendidos por las asistencias médicas.    

Inodoros: había muchos y los de luxe, impecables, con usuarios haciendo fila. Es cierto que a pesar de ello habrá doscientos o trescientos a los que les guste más “regar” los jardines, pero son miles los que con civismo usan los baños que pone el ayuntamiento.   

Y estas son las sombras que se deberían analizar:

Las Ferias han sido un éxito de público, pero se basan en ocupar parques y pistas deportivas, con el consiguiente deterioro y el gasto para reponer lo dañado.   

Al no ser un recinto Ferial estable, con los armarios de luz suficientes, hubo que recurrir masivamente a los generadores de petróleo para que funcionaran las atracciones ./GUDiario.

El recinto para atracciones de mayores junto a la Fuente de la Niña se queda pequeño, y al carecer de los armarios de luz suficientes, hay que utilizar decenas de generadores de petróleo a todo trapo.  No es compatible con unas ferias sostenibles. Al ser terrenos que ya no son propiedad municipal (fueron cedidos al ministerio de Defensa en el intercambio de Las Cristinas) no se pueden hacer obras importantes, y ya veremos cómo cobran a los feriantes las tasas por la utilización del suelo al no ser municipal.  El dilema es: ¿Las atracciones podrían volver al Ferial y dejar a las peñas como este año?

-Los conciertos: es infumable la ocupación de unas pistas de élite, como son las de la Fuente de la Niña, donde se entrenan campeonas del mundo. ¿Pero dónde podemos llevarlos al haber tirado, por lo que se ve precipitadamente, el viejo auditorio de la Cárcel? Si no vuelven los cachivaches al recinto Ferial, la explanada principal de entrada, donde se monta el circo, podría ser suficiente. Hay que darlo una vuelta. No soy partidario de que sean gratis. Y ya no solo, como se ha visto, porque hay gente que retira las invitaciones y luego no va. O que siendo gratis no vendrán los grandes cantantes o grupos del momento, porque saldría muy caro. El Ayuntamiento debe hacer pedagogía; nada es gratis, todo lo acabamos pagando el contribuyente. Las mismas leyes nos dicen que los servicios municipales los debe pagar el usuario que los consume; y así sucede con todo: con el agua, la luz o los bomberos. Menos con los conciertos.   

Pastores y corredores intentan llevar a un toro suelto en el encierro del domingo./GUDiario.

-Los encierros: cuando algunos presumían de habernos acercado a Pamplona, el domingo dimos tres pasos atrás. Es lo que tiene traer una corrida por la noche y sin que los toros hayan tenido tiempo de amadrinarse con los cabestros, soltarlos a las ocho de la mañana. Tardaron ocho minutos en salir y luego fue el caos. Dos toros se volvieron al corral de San Francisco, y el Ayuntamiento ya no se atrevió a que salieran solos. Por último: no puede haber ahorro en los cabestros de escoba. Son indispensables.  

En resumen: el balance, bueno, felicidades a todos los que han trabajado en estas fiestas, empezando por su concejalía,  pero este modelo de okupar parques y pistas deportivas  no se mantiene en el tiempo. Habría que estudiar muchas cosas consultando con los sectores afectados en una comisión de estudio y a partir de ahí tomar decisiones de calado que no se pueden dejar a la pelea política diaria. Las ferias deben salir del barro. Sé que lo que pido es casi imposible, pero yo lo suelto porque mi independencia me lo permite. Esto es lo que hay.  

Trampas en el solitario

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, dedicó no más de cinco minutos a contestar la propuesta de Feijóo de prolongar la vida de las centrales en un debate desigual  [el presidente estuvo hablando 2 horas y 12 minutos; y Feijóo solo 27 minutos], pero que es el único que se puede permitir el jefe de la oposición al no ser diputado. Dijo Sánchez una obviedad, que no es solución construir más reactores nucleares para abordar una crisis en 2022, porque su tramitación implica 15-20 años de media, pero no explicó por qué España no puede hacer como otros países europeos y prolongar la vida útil de sus centrales nucleares, porque según el calendario previsto el primero de los cierres, en Almaraz I, está a la vuelta de la esquina: el 1 de noviembre de 2027.  Sánchez no explica si hay algún motivo, al margen del ideológico, para no alargar la vida de los reactores, por supuesto que sometidos a las actualizaciones correspondientes, testadas por el Consejo de Seguridad Nuclear, el controlador dependiente del parlamento. Con esto de que hay mucha prisa, nuestra política energética consistirá en ir sustituyendo los gigavatios nucleares que se cierren, por aumentar la cuota del gas ruso o de Argelia, al precio que sea, o de los barcos metaneros americanos que lo extraen del fracking, práctica prohibida en España.  Así es nuestra doble moral.

Central Nuclear de Trillo, cuyo cierre está previsto para 2035./GUDiario.

Sánchez hizo trampas en solitario porque expuso una obviedad: al contrario que en Francia, ninguna empresa está interesada en promover una central nuclear de nueva generación, porque al no existir un Plan Energético Nacional consensuado entre las dos fuerzas mayoritarias, como sucede en las democracias avanzadas, ninguna corporación está tan loca como para empezar a construir una central nuclear que un cambio de gobierno hacia la izquierda  podría paralizar. En el sector de la energía hace tiempo que dieron por finiquitado el proyecto nuclear español, pero a buen seguro que se podría alargar ese calendario de cierre de las centrales, que concluye en 2035 con la de Trillo, si hubiera interés en el Gobierno. En esto Sánchez fue meridianamente claro: solo quiere renovables, pero no nos explicó cómo nos vamos a calentar en invierno y a qué precio en este periodo de transición ecológica. Eso sí: la ideología ante todo.

COSAS DE YOLANDA.- La vicepresidenta de Sánchez, Yolanda Díaz,  que a tiempo parcial se dedica a fundar un partido político, algo insólito en la política mundial, es noticia por su última ocurrencia: Topar los precios de determinados productos hasta diciembre y para ello parece que ha convencido a una cadena de supermercados francesa, que se ha encontrado con una impagable publicidad gratis. Yo no doy mayor importancia al asunto, porque no deja de ser una ocurrencia de la Evita Perón a la española, una medida populista que apenas tendrá calado; lo que me preocupa es que toda una vicepresidenta se crea que los precios se pueden regular por decreto, como se hizo en el franquismo hasta los años sesenta, o recientemente en Cuba o Venezuela. Con los resultados conocidos por todos. Pero esto es lo que hay. Yolanda está a la escucha.        

El Gigante se agiganta en Alcalá de Henares

Este último fin de semana hemos vuelto a mirar con envidia a la vecina Alcalá de Henares donde se ha celebrado la primera edición ordinaria del Festival Gigante, después de dos años de pandemia.

Ya sabemos que este festival nació y creció en Guadalajara hasta que, en 2019, coincidiendo con una transición del equipo de Gobierno en el Ayuntamiento, y la falta de garantías sobre cuál iba a ser su ubicación definitiva, fue la excusa para que sus promotores decidieran su traslado a Alcalá de Henares, que ya venían manejando. El Ayuntamiento complutense les daba un fijo de 150.000 euros (en Guadalajara, el Ayuntamiento solo les ponía el escenario principal y los derechos de la barra), les cedía gratuitamente la Huerta del Obispo y la marca Gigante quedaba unida a una ciudad que supera en más de cien mil habitantes a Guadalajara y con mejor ubicación estratégica en el centro del Corredor del Henares.

Una imagen del Festival Gigante 2022, en Alcalá de Henares./Foto: Gigante

Así las cosas, no es de extrañar que el Gigante en Alcalá no haya adelgazado sino que prosigue su ciclo de crecimiento, con una asistencia de unas 24.000 personas según la organización, mientras que en Guadalajara nos tenemos que conformar con unas modestas actuaciones en Ferias en las que hay que recurrir al “todo gratis” para no pinchar en taquilla.

Pero es que Guadalajara no solo perdió un festival que se iba extendiendo por las plazas de la ciudad, a imitación del Sonorama de Aranda de Duero, sino que sigue sin resolver un problema que los organizadores del Gigante apuntaron para justificar su marcha: “La actual situación de incertidumbre sobre un espacio que pueda reunir las características necesarias para la realización de grandes eventos en la ciudad, nos ha obligado a valorar otras opciones que aseguren la estabilidad y seguridad futura del festival».

Tres años después, estamos en la misma situación, carecemos de ese espacio para grandes eventos [lo más parecido sería la explanada grande del Ferial, ahora abandonado] y se ha vuelto a recurrir a una solución antinatural, como es celebrar los conciertos de Ferias en la pista de atletismo de la Fuente de la Niña, con el deterioro que ello supone para la instalación y las molestias a los deportistas, sin que nadie se plantee una solución de futuro: bien en una remozada plaza de toros-auditorio o habilitando un terreno como sucede en Alcalá con la Huerta del Obispo, que además tiene la suerte de estar en el centro.   

Mientras tanto, no podremos reprochar a unos promotores privados que buscaran un mejor lugar para su negocio ni tener esperanza de que algún festival Gigante elija Guadalajara como sede. Pero esto es lo que hay.

P.D.- No tiene que ver nada con el Gigante, pero el último día de las Ferias de Alcalá unos delincuentes se empezaron a pelear en el ferial, y cuando llegó la policía nacional algunos exaltados lo aprovecharon para montar una insurrección en toda regla. Al igual que podemos tomar nota de lo bueno, como es el Gigante, también advertir sobre aquellos que aprovechan los eventos multitudinarios para enfrentarse a la policía, como fin de fiesta.  Habrá que estar atentos.  

La noticia más importante del verano

Sin lugar a dudas que la noticia más importante publicada por Guadalajara Diario en lo que llevamos de verano no han sido el regreso de las fiestas de los pueblos -aunque necesarias eran para el reequilibrio de las cabezas- ni los importantes incendios sufridos en nuestra provincia -que pudieron haber llegado a mayores si no fuera por el gran trabajo llevado a cabo por las fuerzas de extinción-, para un servidor la gran noticia es que los nacimientos en la provincia de Guadalajara siguen a la baja y eso sucede a pesar de que el crecimiento poblacional de Guadalajara está entre los más altos de España en las últimas d´écadas, según el INE.

La noticia nos decía que en Guadalajara siguen naciendo de media 4 niños al día y que ha habido 773 nacimientos. El problema es que son 117 menos que en junio del año pasado y las cifras son aún peores si las comparamos con 2019 porque son 232 niños menos. Esta progresiva despoblación es también acusada por Castilla-La Mancha, que solo aguantó los nacimientos por niños concebidos en los primeres meses de la pandemia.

Solo la natalidad en los primeros meses de la pandemia frenaron el desplome los nacimientos.Foto: JCCM/Archivo GUDiario.

La primera conclusión que extraemos es que ese aumento poblacional que se ha dado en nuestra provincia en las últimas decádas, por el efecto de la inmigración relacionada con la logística, y que en gran medida ha cambiado el perfil de la sociedad alcarreña, antaño sustentada por una clase media que nació con el crecimiento industrial en los 70-80, tampoco es suficiente para garantizar lo que llamamos tasa de reposición.

Este retrato no es mejor que la radiografía que nos ha dejado el INE en toda España, ya que durante el primer semestre de 2022, nacieron la misma cantidad de niños que en el primer semestre de 2021, considerando que son las peores cifras desde 1941. Como corolario, España presenta una de las tasas de de fecundidad más bajas del mundo, apenas 1,19 hijos por mujer y, por tanto, muy lejos de la tasa de repoblación poblacional de 2,1 hijos por mujer.

Ante este panorama, destacados economistas como Juan Ramón Rallo están recordando al ministro Escrivá, responsable de la Seguridad Social, que su modelo de sostenibilidad de las pensiones confiaba en que a largo plazo la tendencia alcista se mantendría, de modo que la tasa de fecundidad pasaría a ser de 1,6 hijos por mujer en 2030 y de 1,8 en 2040, y en una dinámica de incremento. ¿Cómo va a compensar el desajuste?

Esto es lo que hay: de cara a los próximos comicios, además de la consabida política de tuits en las redes sociales, es necesaria una explicación más larga en la que nos propongan qué medidas tienen pensado adoptar corporaciones locales, autonomías y Estado, para estimular la natalidad en España. Como ejemplo, ya tienen algunos modelos del norte de Europa en los que inspirarse. Pero si solo vamos al populismo de la subvención a corto plazo y otras bagatelas, acabaremos teniendo un problema estructural irresoluble. Como el icerberg del Titanic, que lo vieron cuando ya estaba encima. Esto es lo que hay.

El PP peina a su candidato y unas camisetas

A medida que pasan los días, aumentan las posibilidades de que Alfonso Esteban Señor sea el candidato del Partido Popular a la Alcaldía de Guadalajara. Cualquier otra candidatura exótica, encabezada por un independiente famoso, cada día está más lejos, mientras que la opción natural de dar la alternativa al actual portavoz, Jaime Carnicero, vicealcalde con Román, está descartada desde el último Congreso Provincial del PP, al que en primera instancia se presentó sin éxito Carnicero, y que al final acabó coronando a Lucas Castillo, como presidente provincial,  con  Alfonso Esteban como secretario provincial, es decir, el número dos.

Alfonso Esteban, en su época de concejal de Economía.

Según me llega de buena fuente, en estos momentos no se manejan más opciones, por lo que el anuncio de la candidatura de Esteban, podría hacerse al final del verano. De momento, tiene el apoyo de Ana Guarinos, al alza en el PP de Castilla-La Mancha desde su reciente cargo de coordinadora regional, y lógicamente de Lucas Castillo, el presidente provincial. El penúltimo paso es recibir la confianza del presidente regional, Paco Núñez, lo que es verosímil con esos avales. Al tratarse de una capital de provincia, la decisión final es de la Ejecutiva Nacional del PP, es decir de Feijóo y su equipo, pero no suele ocurrir que si un candidato viene avalado por su comunidad autónoma y su provincia, en Madrid se saque a otro candidato de la manga. El PP suele anunciar por bloques los candidatos a las capitales de provincia que han sido proclamados por la Ejecutiva Nacional, y no sería de extrañar que Alfonso Esteban esté entre los primeros. Aunque también es cierto que cuando el candidato no está en el grupo municipal, los que no van a seguir pueden caer en el desánimo y eso no sería bueno para un PP, que espera rebañar la representación de Ciudadanos y plantar cara al alcalde Alberto Rojo, el único candidato que ha sido proclamado por su partido.

A la izquierda del PSOE, José Ángel Morales, el edil de Unidas Podemos, parece que quiere dejar la política profesional después de haber hecho un buen trabajo en la portavocía, aunque a veces le pierda su radicalismo ideológico, y queda por saber qué pasará con los municipalistas de izquierda de Aike, que deciden sus asuntos en la asamblea, y que han tenido en Jorge Riendas a otro buen representante. El éxito de UP y de Aike, juntos o por separado, marcará en gran medida el futuro gobierno municipal, porque no es previsible que ni PSOE ni PP alcancen la mayoría absoluta (así lo detectan los sondeos), con lo que ambos deberán mirar a su izquierda y derecha más extrema para obtener la alcaldía; cosas de esta nueva-vieja política. Vox tampoco ha anunciado su candidato, siguiendo su estrategia de taparlo hasta el último momento, que no le ha salido nada bien en Andalucía, como reconoció el propio Santiago Abascal con Macarena Olona, un cuerpo extraño a Vox Andalucía. Los sondeos acreditan que Guadalajara es una de las provincias donde Vox tiene más expectativas, pero elección tras elección también marcan una tendencia decreciente de la formación de derecha radical y un impulso del PP de Feijóo, que pasa su primera reválida en mayo después del éxito de Juanma Moreno en Andalucía.

Por hoy, esto es lo que hay.

Las camisetas para esta temporada del Deportivo Guadalajara/Foto: CDG.

LAS CAMISETAS DEL DEPORTIVO.- No me convencen las nuevas camisetas del Deportivo Guadalajara con las que jugará la próxima temporada en segunda RFEF. La blanca con ribetes naranjas parece del Valencia, la azulgrana del Barcelona y la morada atravesada por una gruesa raya blanca a una película de cruzados. Pero lo que menos me gusta es ese escudo, con esa “D G” enorme, dispuesta a saltar de su marco, en contraste con el bellísimo logotipo castellano y arriacense que diseñó en su fundación el cuadro morado (?) con Alvar Fáñez de protagonista. Cada uno tiene sus gustos y los míos beben en la tradición en materia futbolística, lo siento. Pero dicho esto, los árboles no me deben impedir ver el bosque, y saber que lo importante es que la nueva propiedad del club está haciendo bien su trabajo, y es posible que esta temporada nos llevemos alguna alegría. No podemos olvidar que la Segunda RFEF no deja de ser la cuarta división del futbol español y que todavía nos queda superar a otra más (la Primera RFEF) para llegar hasta esa segunda categoría del fútbol español de la que disfrutamos durante dos años, de la mano de un gran Carlos Terrazas, hasta que la perdimos por la mala cabeza de alguno que quiso seguir solo en el castillo. Pero esto es lo que hay. Para llegar hasta allí, hay que ir paso a paso y sin hacer tonterías. ¡Aupa Deportivo!  

El día en que no pude comprar la prensa (en papel)

Hace años que lo vengo comentando en mi entorno: “Llegará el día en que no podamos comprar la prensa impresa en Guadalajara”. Pues bien, ese día llegó. Fue el 8 de agosto de 2022 cuando, como tantos días, bajé a Guadalajara desde el pueblo de mi mujer, en el que paso la mayor parte del verano, y aprovecho para hacer algunas compras, regar los tiestos y comprar la prensa en papel. Para leerla repanchingado en un sillón frailuno, como presumía Embid.  

Aunque desde hace tiempo soy lector de prensa digital, sigo comprando ocasionalmente el periódico en papel, porque me gusta tocarlo, oler la tinta y leer en él las tribunas largas de opinión o el reportaje bien trabajado. Soy consciente, desde hace años, y por eso fundé el digital que publica este post, que la prensa impresa está herida de muerte, que casi nadie va con un periódico bajo el brazo y si al principio pensé que en Madrid sobrevivirían solo dos periódicos impresos, de orientación liberal e izquierdista, para el consumo de las elites políticas y económicas, ahora creo que fui muy optimista. En cambio, si la prensa nacional en España está herida de muerte, es muy posible que aguante algo más en algunas capitales regionales  donde el diario en papel sigue repleto de esquelas y sucedidos locales y todavía cuesta 1,30 euros.

La prensa impresa, en España,  recibió la puntilla con la pandemia. Sin una razón científica acreditada, bares y peluquerías dejaron de servirla, cerrando así el principal nicho de mercado que les quedaba y aceleró su ruina. Porque cuando ha remitido la pandemia, y para el Gobierno ha dejado de ser noticia ( Sánchez y autonomías solo informan de la evolución del virus entre los mayores de 60 años, como si el resto de edades fueran inmunes), la prensa en papel no ha regresado a los bares y en aeropuertos grandes, como Barajas, ya no se vende. Antes se regalaba a pares a los pasajeros, que ahora deben conformarse con leerse las instrucciones de emergencia o la revista de la compañía.

Por eso no extrañó mucho que el pasado 8 de agosto no pudiera comprar el periódico en papel en Guadalajara, porque ya me había sucedido recientemente un domingo en una ciudad grande, como Gijón. En los kioscos y tiendas donde todavía se podían ver carteles de “Prensa y revistas”, me explicaban que desde la pandemia no venden allí periódicos, y que se conforman con los polos y las chuches. Y así me ocurrió que esta semana fui al kiosco de Jose en el Jardinillo, y me lo encontré cerrado, al principio pensé que por vacaciones, aunque después me contaron que para siempre. Después me dirigí al kiosco de Emilio, en Santo Domingo, y también estaba cerrado, pero por vacaciones. Y, por último, me encaminé hasta La Llanilla al kiosco de Luis, que también vacaciona hasta mediados de agosto. Me dijeron que podría haber algún punto de venta abierto en la avenida del Ejército, una especie de Último Mojicano en este tórrido verano de 2022, y que en algunas gasolineras siguen teniendo prensa, pero decidí poner fin al peregrinaje y dar por concluido mi Xacobeo particular hacia la prensa impresa. No sin recordar que cuando escribía en Flores y Abejas, había cinco puntos de venta solo entre la plaza de Los Caídos (ahora de España) y la plaza del General Mola (de siempre, Santo Domingo). Y en la ciudad cerca de treinta.

P.D. Ese día sin prensa escrita vino a coincidir con la muerte de un viejo amigo y periodista, Pedro Lahorascala, uno de los emblemas de la prensa impresa de Guadalajara entre los años 60 hasta finales de la Transición, y me llevó al desánimo. Es como si la Guadalajara y la España que conocimos, Pedro, se estuviera cayendo a cachos, y no supiéramos si lo que viene después es mejor, aunque no tiene buena pinta. Pero es ley de vida, ya lo sé. Lo que no cambia es que tendremos un otoño caliente, porque la economía española está muy constipada y anuncia otra recesión, aunque esta vez no tendremos periódicos en papel para calentarnos. Pedro, solo nos quedan los Ipads por quemar. Esto es lo que hay, mi caro amigo. Siempre en mi memoria.      

Por una plaza-coliseum-palacio de congresos

La Feria Taurina se ha presentado días atrás en Guadalajara y nos ha mostrado varias cosas.

Lo más positivo son los carteles en sí, que a priori me gustan porque están las principales figuras del momento, aunque luego habrá que ver si las ganaderías les acompañan, algo que en Guadalajara sería noticia. Que las figuras estén en la Feria es muy importante, porque esta plaza es fundamentalmente de toreros, aunque a los toristas les queda la corrida de Adolfo Martín, unos toros muy complicados de lidiar y de poco lucimiento. En segundo lugar, hay que felicitar a la Casa Matilla, porque apenas recién llegados han sido capaces de estar a la altura. La familia Matilla conoce bien la plaza, porque han estado ligados a ella desde la época en que trabajaban con Balañá y sobre el papel han presentado una de las mejores ferias que se recuerdan, aunque solo los más jóvenes pueden hablar de “la mejor”, porque desconocen que Guadalajara llegó a tener toros toda la semana grande, con MaxiToro, aunque luego la empresa extrañamente no siguió y volvimos a los 4 días de festejos y una novillada para abrir boca. Los más aficionados recordarán cómo se abrió ese año la Feria, con un cartel irrepetible formado por Antoñete, Curro Romero y Frascuelo, imposible de superar. Quiero también resaltar el arrojo torero de algunos diestros, que este año están dispuestos a torear en cualquier lado y en condiciones menos ventajosas que otras temporadas, porque así entienden que es la forma de colaborar con un sector perseguido por algunas administraciones y gobiernos, como sucede con el central, que no televisa las corridas de toros y en los telediarios solo sale alguna imagen cuando es cogido de gravedad algún torero. Al frente de esos toreros comprometidos está Morante de la Puebla, que va a superar el centenar de corridas, y que si bien es mucho pedir que esté regular en los dos toros, él es capaz de poner la plaza boca abajo con uno solo. La presencia de figuras como Morante, Juli, Roca Rey, Daniel Luque o Manzanares en corridas donde se lidiarán los toros del encierro, que se corre a las ocho de la mañana, demuestra que cuando se decía que las figuras no venían a Guadalajara por ese motivo eran cuentos chinos. Se trataba simplemente de querer o no querer; y ahora las figuras quieren. Aplaudir también que entre las administraciones que persiguen la Fiesta no está la municipal de Alberto Rojo, con un gobierno PSOE-Ciudadanos, y yo les felicito por ello, aunque de cara a un futuro hay que conseguir que los carteles de Guadalajara se presenten con la debida antelación como las ferias taurinas emblemáticas. La Feria de Guadalajara no está bien encajada en el calendario, tiene todavía mucha competencia en la contratación de toros y ganaderías, amén de coincidir con las fiestas en muchos pueblos de Guadalajara, y en eso siempre recuerdo que el gran Antonio Cortés, defendía que las Ferias de Guadalajara deberían ser la última semana de septiembre, coincidiendo con el famoso veranillo de San Miguel, y desligarlas de las religiosas de la Antigua, como era tradicional hasta una etapa reciente. Sigo pensando igual.

La edil de Festejos en la presentación de la Feria Taurina./GUDiario.

La foto de la presentación de este Feria taurina nos ha hecho recordar el mal estado general de la plaza de Guadalajara, que no se soluciona con una inversión de 150.000 euros. Nuestra plaza se ha quedado muy vieja y es incompatible con unos estándares actuales de comodidad. No se puede pagar una entrada cara y que encima tengas que sentarte en un asiento reducidísimo, metiendo las rodillas al de delante y recibiendo el rodillazo del de detrás. Eso no pasa en ningún deporte o espectáculo que se precie. La suerte este año es que por compromisos adquiridos las figuras no van a coincidir con los dos festejos del fin se semana, con lo que se evitará lo peor que le puede pasar a la plaza de Guadalajara: que tenga un lleno de los de no hay billetes, porque ese día todos comprobarán que las anatomías del español medio de 2022 es muy superior a los de la postguerra, en que se hizo este plaza, cuando en España no era necesaria ninguna dieta de adelgazamiento y el ciudadano medio medía 1,60. El día que se llene esta plaza, de no hay billetes, ocurrirá que la corrida deberá empezar media hora más tarde porque habrá centenares de personas que no habrán conseguido llegar a sus asientos y el pueblo creerá que se han vendido entradas de más. No es así, solo que el tamaño de los asientos y la distancia de las gradas es tan pequeña que es imposible su tránsito normal. Por no hablar de su evacuación, por estrechas escaleras y vomitorios, que no cumplen con los actuales estándares de seguridad.

Hace tiempo que llegó el momento de plantearse una reforma total de la plaza, con un nuevo graderío más cómodo, y sería deseable que con un techado que permitiera hacer de la instalación un Coliseum multiusos, con capacidad para conciertos y ferias comerciales, ya que no se pudo construir el palacio de Congresos de Guadalajara y es un dinero que se ahorró la Junta de Comunidades. Este nuevo concepto de instalación se llegó a manejar en los años previos a la burbuja inmobiliaria, contando con el atractivo que supone poder alquilar en el centro de Guadalajara locales comerciales y de restauración. Al final llegó la crisis financiera de 2008 y este planteamiento de hacer una plaza-coliseum por iniciativa público privada se desestimó, y no tengo datos para saber si ha llovido lo suficiente desde entonces como para que un grupo de empresas esté interesado en acometer esa reconstrucción de la plaza de toros a cambio de una concesión a largo plazo. Lo único que sé es que mediante la gestión directa municipal de la plaza, lo único que podemos aspirar es a una mano de pintura parcial y a que se cambie algún burladero; y poco más.

Guadalajara necesita una plaza-coliseum-palacio de Congresos con los criterios de comodidad, eficiencia energética y seguridad del siglo XXI, porque hay que ser muy aficionado para ir a los toros en Guadalajara, y luego dicen que la fiesta está en decadencia. Lo que está en decadencia son plazas como la de Guadalajara desde su mismo concepto en sí.

DESJUDICIALIZACIÓN.-La última melonada de la reunión bilateral entre el gobierno de España y el gobierno de Cataluña es lo que se nos relató por el bardo Bolaños: que ambos gobiernos han decido desjudicializar el “conflicto”, como así llaman los independentistas a sus relaciones con el Estado. ¿Quiere esto decir que si el gobierno de la Generalidad vuelve a tomar una iniciativa anticonstitucional -como puede ser proclamar otra vez la independencia unilateral o incumplir el 25% de castellano o español en la escuela catalana- el gobierno de España, presidido por Sánchez, renunciará a la aplicación de la Constitución Española y del Estado de Derecho? Porque una democracia que no se sustenta en la aplicación de la Ley no es democracia, es una república bananera más. ¿Cómo todo un ministro de la Presidencia puede sostener estos planteamientos antijurídicos en un país de la Unión Europea, que Sánchez presidirá al final de esta alucinante legislatura? Pues esto es lo que hay.

Robin Hood, Sonia Reyes y las golondrinas

Sánchez se puso el traje de Robin Hood y como reacción ante el último traspiés electoral en Andalucía representó una lucha quijotesca frente a la banca y las eléctricas, sus nuevos molinos de viento, sectores a los que castigó con un nuevo impuesto extraordinario que no supo explicar. Solo le faltó, para completar el círculo, anunciar que también subiría la fiscalidad de los puros que, por lo que él nos cuenta, se fuman en los cenáculos que conspiran contra él.

Sánchez nos vendió un discurso que dijo ser socialdemócrata cuando en realidad es peronismo. Es decir, mucho ruido y pocas nueces; y ninguna reforma de calado sostenible en el tiempo. Bengalas de humo. Grandes enunciados sin soporte conocido.  Porque no sabemos en realidad cuál será la repercusión de sus medidas. Y lo más grave es que, por las entrevistas que han dado, sus ministros económicos tampoco, tanto que no son capaces de justificar cuál es el cálculo real de las cantidades que Sánchez pretende ingresar. ¿Cómo va a conseguir la ministra de Hacienda que eléctricas y banca detraigan este impuesto de sus beneficios, sin arruinar el dividendo a millones de pequeños ahorradores de clase media que tienen sus fondos de pensiones y de inversión vinculados a la marcha en bolsa de estas grandes empresas? ¿Cómo va a impedir que este agujero en su cuenta de resultados no se acabe traduciendo en más ajustes en las plantillas de los bancos, más comisiones y en menos cajeros en los pueblos? ¿Pero alguien se cree que este impuesto especial no lo acabará pagando el consumidor? ¿O que no redundará en los planes de inversión de las eléctricas, que en la mayoría de los casos están centrados en el desarrollo de las energías renovables?

Junto a este paquete fiscal, Sánchez anunció, apresurado, varias subvenciones temporales, sin un estudio detrás, como se detecta cuando rascas y ves que entre pitos y flautas solo unos pocos se podrán beneficiar de la gratuidad del abono de cercanías, porque no lo ha negociado con las comunidades autónomas. ¿Pero no era él el paladín de la cogobernanza? ¿O solo es con Pere Aragonés, a quien recibe en La Moncloa como un presidente de la República? Nuestra esperanza es que también le acabará engañando.

El tiempo dirá cuál es el impacto real de estas medidas populistas  en el comportamiento de la inflación y de la economía española en general, que ha sido cuestionada por los analistas financieros. Lo que no podemos negar a Sánchez es que con su discurso de Robin Hood ha cohesionado a la izquierda más radical al hacer suyas propuestas que antes despreciaba, aunque tenga descolocada a su vicepresidenta Yolanda Díaz, por su estrategia de ocupar el espacio político de su partido Sumar.  Sánchez abandona el centro-izquierda para asegurarse los apoyos parlamentarios de la izquierda radical, independentistas y bilduetarras, y no le preocupa en absoluto que los estudios demoscópicos digan que va desnortado hacia el precipicio. Pero como su admirado Juan Domingo, el único Perón es él y si alguien en su partido no está con él, ya sabe dónde tiene la puerta.  A Sánchez no le va echar nadie otra vez de la secretaría general del PSOE aunque tenga que arder Roma con él.  

Esto es lo que hay. Bildu reescribiendo la historia de España hasta 1993, para confundir la lucha antifranquista con el terrorismo, que segó la vida de más de seiscientos españoles solo en democracia, y su portavoz, la tal Aizpurúa -aquella directora de periódico que tituló “Ortega Lara vuelve a la cárcel” tras su liberación por la Guardia Civil-, dando lecciones desde la tribuna del Congreso sobre defensa de los derechos humanos y lo mala que es la Constitución española y la Transición que la propició. Sánchez le contestó sonriente con guante de seda, modos y maneras que endureció  para replicar a los portavoces del PP, Ciudadanos o Vox. Porque él, y lo dejó claro, ya está en el monte con Robin Hood, y lo que toca es robar a los fumadores de puros para repartirlo entre los fumadores de Ducados.

Sonia Reyes frente a la entrada a la piscina municipal. Archivo

PISCINA «SORIA REYES».-Por decreto de la Alcaldía, la piscina cubierta Sonia Reyes vuelve a llamarse oficialmente “Sonia Reyes”. Tantas vueltas para esto, porque la realidad es que los vecinos nunca dejaron de llamarla así. Lo que demuestra que el nombre estaba bien puesto. Sonia Reyes fue diploma olímpico en Atenas 2004, logro que un deportista alcarreño no consigue todos los días. Pero despojaron de su nombre a la piscina sin razón aparente, más allá de que a Sonia Reyes le dio por aceptar una oferta de José María Barreda para formar parte, como independiente, de la candidatura del PSOE en Guadalajara. Como entre medias no pasó otra cosa que aconsejara la degradación pública de la deportista, estamos ante un gesto de sectarismo, el peor mal de la política española. Con los recelos que hay para que los profesionales más valiosos participen en política (una actividad que solo parece reservada a los miembros de las juventudes de los partidos), gestos como aquel fomentan ese desaliento, porque sospechan que sus méritos profesionales acabarán cuestionados y ridiculizados. Y entonces se preguntan: ¿Para qué me voy a meter en líos?   

GOLONDRINAS.– El edificio de Maragato, que por fin podrá ser derribado después  de 16 años invadiendo nuestra calle Mayor, tendrá que esperar. El motivo: que algunas golondrinas anidan en su arruinada fachada, con lo que Medio Natural entiende a sugerencia de Aike que habrá que esperar a que pase ese ciclo de anidamiento hasta después del otoño. Mi única reflexión es: ¿Qué otra cosa sucederá para que cuando se vayan las oscuras golondrinas, el edificio siga afeando nuestra plaza Mayor? Me temo que, en Guadalajara,  hace tiempo que no sabemos distinguir entre lo esencial y lo accesorio. Pero esto es lo que hay, como cantó Gustavo Adolfo Becquer.  

Volverán las oscuras golondrinas

en tu balcón sus nidos a colgar,

y otra vez con el ala a sus cristales

jugando llamarán.

……………….

Volverán del amor en tus oídos

las palabras ardientes a sonar;

tu corazón de su profundo sueño

tal vez despertará.

Pero mudo y absorto y de rodillas

como se adora a Dios ante su altar,

como yo te he querido…; desengáñate,

¡así… no te querrán!

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